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jueves, 8 de agosto de 2024

PEDRO ABAJO DEL RIO- SALCHICHAUTO



SALCHICHAUTO, con el anuncio de Cervezas El León y Ducados.
Matrícula BI-407.44-.

 Pedro Abajo del Río era un burgalés de Baños de Valdearados, muy cerca de Aranda de Duero, esta a dos horas y veinte-seis minutos de Bilbao, este pueblo en la actualidad tiene 342 habitantes y poco más se puede decir de él.
Se vino a Bilbao en busca de trabajo y lo hizo una vez cumplido el servicio militar, para trabajar en la Panadería de Iturbe que estaba en la calle Ledesma. En este horno de panadería se hacían productos frescos de panadería y pastelería, excepto galletas. Era una panadería muy acreditada en Bilbao, por su pan de molde poco conocido entonces en Bilbao y sus volovanes.
Pudo estar trabajando unos diez años, hasta que un día un tal Cándido que manejaba dos o tres furgonetas DKW preparadas para dedicarse a la venta ambulante, le ofreció venderle una y le pago cerca del las ciento- veinte mil pesetas que era mucho dinero en aquellos años.



En la calle Alameda Urkijo

Pedro comenzó con el negocio hacia el año 1965, estableciéndose en la calle Marqués del Puerto esquina con la Gran Vía, donde estaba la Librería Estornés, seguida la Tintorería la Higiénica y la tienda de Trini y Cruz era una tienda mercería, fornituras y pasamanería, al fallecer la señora siguieron en el negocio la hija y al final el hijo Roberto, que fue el que le dio al negocio el acta de defunción, era un museo de cosas que ya no tenían salida, se le habían muerto todas las clientas, ya no se cosía nada en casa, la ropa venía confeccionada.
En ese tramo se instaló Pedro, con una furgoneta DKW-Imosa-Auto Unión, era de la segunda serie, con motor de dos tiempos de gasolina y de tres cilindros de finales de los año 1950. La representación la tenía don Jesús Matute con las oficinas en Marqués del Puerto.
También se le solía ver por la Feria de Muestras cuando había exposiciones, mucha gente y la posibilidad de vender refrescos y bocadillos. Le fue bien el negocio y pensó que en Navidad en el Parque Infantil, podía hacer negocio.



PEDRO, AL PIE DEL CAÑÓN
Foto de el Correo.

Años después se marchó a la calle Alameda Urquijo, en la acera del Coliseo Albia, tenía a los chicos del Instituto y las noches de ópera a los socios del A.B.O. que en los entreactos le podían hacer gasto. Le compraban un bocadillo de salchicha con mostaza o ketchup, eran señores muy trajeados y mujeres con vistosos vestidos de noche para la ocasión, pero estos mismos también solían acudir al Café Bernabé de Marcel, entre Bertendona y Alameda Urkijo.
Siguió haciendo bordillo con su D.K.W durante más de treinta y cinco años, pudo sacar a su familia adelante, bocadillos de una salchicha, con dos, de chorizo, jamón para los más refinados.
Ese olorcito que desprendía la furgoneta a salchicha a la plancha con mostaza, abría el apetito a muchos jóvenes que eran sus principales clientes.
Han pasado los años y Pedro se queja porque dice que ya no es lo que era, mucha democracia y poca pasta y lo dice por una boca por donde solo asoman dos dientes. Hasta quinientos bocadillos he llegado a vender en Begoña por fiestas, ahora la gente tiene el dinero guardado. En una noche loca llegó a vender hasta dos mil bocadillos.
Pedro no sabía conducir se la llevaban a los sitios señalados y años después de vieja la remolcaban. Por esos años tuvo otros competidores pero no por su zona de trabajo.
Tuvo sus sponsor Cerveza el León que por el rótulo en la furgoneta le daba 40.000 pesetas y la publicidad de el tabaco Ducados al que también le sacaba algo.
Las hamburgueserías que van saliendo le quitan clientes, cambian los gustos y hay otras modas, aunque Bilbao nunca ha sido de muchos perritos calientes.
Tuvo una úlcera sangrante que con los años le degeneró en un cáncer.
Aunque se queja del trabajo y de su rentabilidad, tiene a dos hijos estudiando en la Universidad, además dos pisos y la furgoneta, también le toco un millón a la lotería, pero no quiere que le confundan con un empresario de éxito, vivimos bien porque somos ahorradores y nos organizamos la vida.
Su mujer se llama Agripina Puebla y tiene dos hijos Josué y Sonia.
Pedro Abajo del Rio murió en Bilbao el 24 de febrero de 2004 a los 69 años.
Salchichauto fue un referente y punto de encuentro de muchos bilbaínos a lo largo de los años, después del trabajo, los que una tarde noche iban al cine Filarmónica o al Coliseo Albia en la sesión de tarde noche, las vísperas y las fiestas eran los días que más se vendía, el rito social de acudir al cine sobre todo los viernes y sábado, pero todo eso ya se ha perdido, el recuerdo y la nostalgia de todos esos cines que olían a ambientador, en unas cómodas butacas, fresquito en verano con el aire acondicionado y el servicial acomodador que te llevaba a tu butaca con la linterna y la propina en la oscuridad, eso ya no lo volveremos a ver.




LA COMPETENCIA,
Foto de Miguel Martín Zurimendi.


FIN
Sabrosa memoria del Salchichauto, periódico Bilbao Carlos Bacigalupe.
Hemeroteca de el Correo, Arantza Furundarena.

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