Nació el 24 de abril de 1899 en Azkoitia, su padre se llamaba Fermín Uría Narbaiza bautizado en Azkoitia el 7 de julio de 1864 y su madre en el mismo lugar un 12 de enero de 1867, se casaron en Azkoitia el 15 de abril de 1890.
Luis con diez y seis o diez y siete años ya vivía en Bilbao, aunque no en el mismo Bilbao de aquellos años, es posible que estuviera viviendo en Deusto, porque aquí se inició de chaval al fútbol.
En 1938 ya figura empadronado en Bilbao y vivía en la Plaza de los Mártires,12 de soltero.
Su padre era famoso en Azkoitia, por la práctica de los deportes rurales, levantamiento de piedra, juego de bolos y aizkolari.
Luis fue un deportista completo y multidisciplinar, practicando muchos deportes y luego enseñando su práctica.
Corrió los cien metros, los cuatrocientos metros y luego la prueba de Madrid-Guadalajara-Madrid de cien km., lanzamiento de disco, martillo, peso y barra vasca, todo esto cuando el deporte era afición y no profesión.
En el año 1918 jugaba al fútbol en Bilbao, con el Mendibera de Elorrieta y en el Deusto.
Otros deportistas de élite y multidisciplinares fueron los hermanos Adarraga, también guipuzcoanos. Nacidos en Hernani, Ramón, Luis y Javier algunos fueron socios del club y participaron en infinidad de deportes y muy variados, pala, pelota mano, ciclismo, montaña.
LOS HERMANOS ADARRAGA GORROCHATEGUI |
Al celebrar el Athletic sus veinticinco años, en 1923 Luis participó y ganó en lanzamiento de disco, que era su especialidad favorita.
Por aquellos años, me refiero a los años 1920 el equipo de atletismo del club, lo formaban José María Puyo, José María Peña, Vicente Abad y Enrique Querin.
Practico atletismo en Madrid, pertenecía a la Federación Castellana de Atletismo. En los años 1921-22-23 fue campeón de Castilla de disco con una marca de 35,67 metros. También subcampeón de España en esa modalidad, participando en otras pruebas de atletismos, saltos, lanzamientos.
En 1924 defendió los colores de la Federación Atlética Guipuzcoana, campeón de disco de Guipúzcoa y subcampeón de España.
LUIS URIA ARRIETA |
Le ganó a otro guipuzcoano Lizarza y como en una comida Uría no bebió vino le espetó: Desgraciado, desgraciado ¿Así como vas a tirar el disco ¿Gixajo, gixajo, ola bota berdek ik diskue?.
Estuvo cuatro años en Argentina de 1924 a 1928, allí de dedicó al fútbol en Rosario donde le conocían como el "Rápido", quedó su equipo el tercero, también jugo a pelota mano.
Volvió a España y siguió con lo que más le gustaba, el lanzamiento del disco y otra vez fue campeón de Castilla, unos meses vivió en Canarias, jugando al fútbol en el Tenerife.
En el protectorado español de Marruecos, en Tetuán formó las bases para la formación de la primera federación de fútbol.
En el año 1931 regresó a Bilbao y con otro grupo de aficionados fundó la Agrupación Atlética Vizcaína, su presidente era Juan Martín,
el vicepresidente Alfredo Samaniego y Félix Erausquin fue vocal.
Compitió y ganó varios campeonatos entre 1931 a 1948 de lanzamiento de martillo, disco y peso.
Jugó a pelota mano en el frontón del club, en los campeonatos sociales con Jaime Ornilla, Jesús Gil y Antón Ochandiano.
Destacó en la barra vasca y ya en el año 1956 ingresó como socio en el Club Deportivo de Bilbao, lo presentaban los socios Julián Echevarría "Camarón" y su hermano el periodista Adolfo Echevarría.
Trabajaba de contable, en una imprenta de la calle Ronda 30 bajo y su vivienda estaba en la calle Miravilla dos de Bilbao. Luis Uría estaba en ese año soltero y tenía 42 años.
A finales de los años 1940, años 1950 hasta prácticamente el año 1964, se hizo cargo de la comisión de atletismo del club que estaba en horas bajas, este hombrachón de 1,80 metros de altura y 87 kilos de peso desarrolló a lo largo de los años una labor de la práctica deportiva y la enseñanza de la misma en todos sus aspectos e hizo una labor de proselitismo entre los jóvenes.
Al terminar la guerra en 1940 la comisión de atletismo estaba a cargo José Antonio Greño Pozurama sin apenas actividad salvo alguna carrera pedestre de poca importancia, en el año 1945 se hizo cargo un atleta Rafael Brancas Martínez pero este era más bien un gimnasta de aparatos y no se prestó mucha atención, porque entonces el club tenía un buen equipo de gimnastas en competiciones nacionales.
En los años que van de 1940- 41- 42-44- 45- 47 Luis Uría, fue campeón vizcaíno de lanzamiento de martillo con una marca de 35,94 metros.
En el año 1964 existía un dilema, vender el solar del club y marchar a otro sitio o hacer uno nuevo en el mismo lugar, dado que el edificio presentaba un aspecto lamentable de ruina y deterioro.
En el año 1966 se establece una cuota de obras, seis mil pesetas y ya en el año 1965 muchos socios se habían dado de baja y de entre todos ellos Luis Uría que se dio de baja el 30 de abril de 1964, se marchó a vivir a San Sebastián, falleciendo en ese lugar en el año 1980. Iba ha cumplir los ochenta años, Félix Erausquin su fiel amigo de deporte y compañero, le comunicó a Tutor Larrea la triste noticia.
Luis se casó con Emilia Lasagabaster Urbina, nacida el 3 de noviembre en Aretxabaleta (Gipuzkoa).
Contemporáneos de Luis en el atletismo, fueron Vicente Abad Ruiz del Álamo, nació en Bilbao el 19 de abril de 1898 y esta considerado como uno de los mejores atletas de Bizkaia, de profesión delineante y un excelente fondista.
En 1923 ganó en pista los campeonatos de Bizkaia de los 400-800 y 1500 metros lisos.
En 1924 fue campeón nacional absoluto de los 800 metros con un registro 2-07-4. Consiguió cuatro récords, además de los citados 400m 56-6 y en los 1500 m. 4-37-2.
Compitió en los campos de Romo, Berazubi de Tolosa y falleció el 4 de marzo de 1974.
Los hermanos Puyo Goti, en 1933 vivían en la calle Elcano, 24 primer piso y eran socios del club. José María Puyo Goti nacido en Bilbao el 28 de mayo de 1898 y de profesión comisionista, pasó por sus condiciones físicas rápidamente al atletismo en los 400 metros lisos hizo un tiempo de 54-8, batió el record nacional de 4x400 con sus compañeros con un tiempo 3-48-4, el cuarteto lo componían Enrique Querín, Vicente Abad, José María Peña y Puyo. Fue amigo de otro gran atleta Fernando Artiach.
El hijo del cónsul francés en Bilbao, se llamaba Enrique Querin Fresnedo y había nacido el 22 de junio de 1902 en Burdeos, más joven que los anteriores participó con ellos en las mismas especialidades, hizo los 400 metros en 55-0.
Vivía en un chalet de la calle Gordoniz número siete.
José Luis Baquero Guraga, nacido el 1 de mayo de 1894 fue otro atleta destacado en aquellos años. Pionero del atletismo vizcaíno, participó en el Campo Volantín en 1914, aquél maratón atlético que organizó el Club Deportivo.
Los cien metros lisos en 12 , 2s-, 110 m. vallas 21- 2, salto longitud 5,28 metros y finalmente con los años lo dejó en 5,86 m en 1917.
Juan Bautista Erice fue campeón de España salto con pértiga con 3m-18cm en 1919.
Pedro Irigoyen Castillo en 1924, hizo en salto de altura 1,75m.
JAVIER ADARRAGA, AÑO 1924 CAMPEÓN OLIMPICO DE PALA AÑO 1924 EN PARIS, FUE UN DEPORTE DE EXHIBICIÓN ANTES LO FUE EN PARÍS EN 1900. SU HERMANO LUIS ADARRAGA A LA IZQUIERDA AÑO 1912, CICLISTA. |
El 9 de agosto de 1933 José Trauko periodista deportivo del periódico Excelsius le dedica un artículo a Luis Uría Arrieta y empieza así: Luis Uría el gran animador atlético, entusiasmo, constancia y "chaladura".
No sabemos cual será la causa, pero indudablemente es cierto que la chaladura atlética es la que posee en mayor grado de intensidad entre todos los deportes que conocemos, es un muchacho que se aficiona en su juventud al atletismo o mejor dicho a practicarlo, quedará atrozmente apresado en sus garras y se prestará a los mayores sacrificios para ejercitarlo.
Ello constituirá como una pesadilla en su vida, como signo que le arrastrará en todo momento y será superior a sus fuerzas, el atleta envenenado será siempre un prisionero de su afición.
Decimos esto al verle actuar en los campos, las pistas y hasta en los lugares que no están preparados para la práctica deportiva.
El atleta Luis Uría es un muchacho de Azkoitia que después de trotar por esos mundos, ha venido a recalar definitivamente en Bilbao.
¿Y quién es Uría, el viejo?.
Al terminar la gran guerra europea 1918, oímos hablar de él o leímos su nombre en la prensa, cuando se trataba de hacer algunos comentarios atléticos de Castilla, total un vasco mas trasplantado a Madrid, de los muchos que estudiaban allí en las universidad y practicaban variados deportes en aquella época, particularmente el fútbol.
Había un aficionado al deporte, que por cierto no lo dejaba en paz, porque el nombre Uría se leía con extraordinaria frecuencia.
Nada mas sorprende aquella antigua constancia que nos maravillaba, aquella embriaguez al deporte, que nos extrañaba cuando todavía no le conocíamos.
Todo esto explicado en este "morrosko", que no le hacen falta inyecciones de afición.
Él nos las puede dar muy cumplidamente, la principal afición de Uría ha sido siempre el atletismo y dentro de esta modalidad, los lanzamientos.
En el año 1921 perteneció a la Gimnástica Madrileña, fue campeón de Castilla y recorman peninsular de disco con 35,67 metros y en esa misma época es futbolista del mismo club.
Esta sociedad se aprovechaba de los elementos vascos para sacarles el jugo, conociendo la buena disposición de estos estudiantes vascos.
En la primera marcha libre de 100 km del recorrido de Madrid- Guadalajara- Madrid se clasificó cuarto en la general y el primero de Castilla.
13 DE ABRIL DE 1943 URIA BATE LA MARCA DE BIZKAIA EN LANZAMIENTO DE MARTILLO CON 35,94 M. del MARCA. |
En las bodas de plata del Athletic, representó a Castilla y en las pruebas atléticas quedó el primero en lanzamiento de disco.
Participó en varios campeonatos nacionales uno de ellos en Berazubi (Tolosa), donde se clasificó el segundo.
Sus andanzas un día le llevaron hasta Buenos Aires, donde siguió fiel a su bandera deportiva permaneciendo cuatro años en ese país, practicando el atletismo, pelota mano y el fútbol solía jugar de medio centro.
Después de su paso por Argentina, marchó Aragón concretamente en Cuenca, porque estaba interesado en el lanzamiento de barra aragonesa.
Otro paso para adelante fue cuando se marchó a lo que entonces se llamaba el Protectorado Español en Marruecos y allí organizó la Federación de Fútbol poniendo en marcha ese deporte.
Luis Uría era un vasco de sentimiento y de corazón y no podía olvidar una de sus preferencias deportivas, nuestro juego de la pelota, para eso el nació en el Goierri, en ese lugar amable de Gipuzkoa que es el corazón de el país.
En ese deporte en calidad de amateur es de los que necesitan jugar tres o cuatro partidos para calentar la mano.
¿Agotarse? es tontería cuando le coge el gusto al atletismo, que ocurre siempre que se calza las zapatillas y se pone el traje de faena, sería capaz de agotar a una legión de espectadores, relevados antes que él, sin que diera muestras de cansancio.
Es la chaladura, la borrachera atlética que la tiene metida hasta en los huesos, que no le dasaparecerá mientras le quede un pelo en su flequillo solitario.
Admiramos su optimismo permanente y pensamos que elementos como él hacen falta en cada región, en cada pueblo para levantar el espíritu deportivo entre la muchachada.
Tiene un entusiasmo contagioso, más que todos los artículos que se puedan publicar en la prensa.
Su labor de captación, con su simpatía personal y convencimiento con que habla, arrastra fácilmente a sus oyentes y los fuerza quieran o no a alistarse en el ejército del deporte activo.
Un verdadero animador, nos ha caído en tierras vizcaínas.
Que lo digan los Erauskin, los Celaya y demás atletas vizcaínos obligados a seguirle a Sopelana, a las playas algorteñas, en las fiestas veraniegas con los utensilios bajo el brazo, la barra, el disco, la pesa o el martillo.
Se habrán pasado la mañana entretenidos con esos chismes en Ibaiondo o en Galdácano, sudando la gota gorda, pero a la tarde hay que continuar la faena, para lograr al contacto con los aires marinos esas marcas que no son fáciles de lograr tierra adentro.
Alegrémonos del refuerzo material y sobre todo moral que a los vizcaínos nos ha venido llovido del cielo y hagamos votos porque jamás desaparezca su espléndido optimismo, contagioso para los futuros atletas de nuestro país.
FIN
Hemeroteca de El Correo artículo, Un deportista Completo de Manu Montero, 21 de noviembre de 1999.
Euskariana.
Archivo Diputación Foral de Bizkaia.
Archivo Club Deportivo Bilbao.
Archivo Ayuntamiento de Bilbao.
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