*El Sitio nació con el propósito de hacer frente a un rosario de valores, que de la mano del carlismo, buscaba el mantenimiento de
una España anclada en un sistema cuasi feudal del Antiguo Régimen.
El carlismo prácticamente casi a desaparecido.*
SE DICE QUE EN SUS LOCALES HABÍA UN CARTEL CON EL
LETRERO: "AQUÍ NO ENTRAN LOS CARLISTAS".
*El último Sitio de Bilbao, el más largo que sufrió la villa en el siglo XIX, sucedió en el marco de la última Guerra Carlista 1872-1876.
Se inició el 29 de diciembre de 1873, día en el que los carlistas cerraron la ría al tráfico fluvial con cadenas por diferentes puntos.
Las defensas de la villa eran una combinación de baterías, puertas, atrincheramientos, barricadas y cierres rodeando el casco urbano.
Las instalaciones militares como los fuertes de Miravilla y del Morro o los puestos avanzados de Abando y Campo Volantín se situaban fuera del entorno amurallado.
La peor etapa del Sitio comenzó el sábado 21 de febrero con el bombardeo de la villa. Los carlistas pudieron cañonear Bilbao con facilidad pues el ejército liberal se encontraba frenado en las cruentas y famosas batallas de Somorrostro.
Durante más de ciento veinte días que duró el Sitio, se llegaron a contabilizar 6.785 proyectiles, hubo que establecer el racionamiento a partir del 23 de marzo y la villa sufrió numerosas pérdidas humanas y materiales.
Tras la derrota carlista en las batallas de Somorrostro, las tropas gubernamentales lograron el levantamiento del Sitio, entrando por el puente de San Antón, el único que permitía el paso a la caballería, a las cinco de la tarde del dos de mayo de 1874 al mando del General Gutiérrez Concha entraron en Bilbao.*
El Sitio fue constituida por un grupo de liberales bilbaínos en 1875. La denominación procede del "Sitio" a que fue sometido Bilbao durante la última guerra carlista, levantada por el general Manuel de la Concha, el dos de mayo 1874.
Don Canuto Azcue y Benito Gardoqui se presentaron ante el gobernador civil de Vizcaya, con la siguiente petición que han acordado formar una reunión o sociedad que se titulará el Sitio.
Los constituyentes de esta sociedad, empezaron a reunirse al
aíre libre en el Arenal. Una vez elegido el nombre que había de identificarlos. Sociedad el Sitio, peregrinaron por varias sedes provisionales, calle Nueva dos, la casa de Cochorro junto a Jardines y la calle Nueva junto a la Ribera donde hoy está el Club Cocherito, hasta que se hizo un edificio propio, una de las joyas arquitectónicas de Bilbao.
En la calle Bidebarrieta, levantado sobre el solar de unas casas de Adán de Yarza, obra del arquitecto Severino Achúcarro.
Edificio conocido en toda España como el Palacio de la Libertad y se inauguró el 12 de diciembre de 1890.
Echena pintó el plafón del salón principal y Anselmo Guinea los paneles alegóricos a la música, el canto, el teatro, la danza. La vidriera situada donde se bifurca la escalera central, fue diseñada por Achúcarro y se diseñó en Amberes.
El lema de la Sociedad el Sitio, era "Sin color, ni grito", o sea el mismo que figuraba en el himno de los Auxiliares, los batallones civiles armados que defendieron Bilbao contra el asedio carlista.
Fue una sociedad de recreo, pero sobre todo un centro cultural de primer orden, de los más importantes del país, después del Ateneo de Madrid.
Fiel a su historia, la patriótica sociedad " El Sitio" recogió la bandera que el Ayuntamiento de Bilbao abandonó al acordar que no se conmemorase la gloriosa fecha de la liberación de la invicta villa.
En el Palacio de la Libertad se ha organizado la grandiosa manifestación que hoy celebrarán los liberales vasco-navarros, en ese soberbio edificio donde se congregarán todos ellos, con sus honrosos trofeos y banderas.
Se construyó este magnífico edificio, con el concurso del arquitecto Severino Achucarro, cubierto por los socios con una suscripción de obligaciones hipotecarias por valor de 750.000 pesetas, para llevar a cabo la construcción que comenzó en agosto de 1888 y terminó en 1890, se inauguró el 12 de diciembre de 1890.
La artística fachada es de estilo renacimiento moderno y consta de tres cuerpos, llamando la atención los balcones, cuyas repisas afectan en su plataforma elíptica, composición valiente y atrevida.
En la planta hay una suntuosa y elegante escalera central de forma imperial, con balaustrada de hierro y adornos en bronce, teniendo al frente una artística vidriera en la que se destaca una bomba con el número 5.309, que fueron las que arrojaron los carlistas sobre Bilbao y que constituye lo que pudiera llamarse el escudo de la Sociedad.
LA DEFENSA DE BILBAO FOTO DEL ARCHIVO DE LA DIPUTACIÓN FORAL DE BIZKAIA. |
En la planta baja se halla la biblioteca que contiene buen número de volúmenes y en lugar preferente un hermoso retrato de cuerpo entero del general Castillo, el defensor de Bilbao en 1874 y socio honorario que fue de esta sociedad.
También abajo esta el espacioso salón de billares, decorado con buen gusto y originalidad, donde funcionan con holgura nueve mesas de billar.
En el piso principal hay un gran vestíbulo de piedra y a uno de los lados el salón de fiestas, de forma ovalada y decoración regia de estilo renacimiento, con magníficas decoraciones divididas en dos partes, el techo y las escocias.
El primero es obra del laureado pintor guipuzcoano José Echena, con el símbolo del triunfo de la Libertad.
En la escalera que conduce al piso segundo llama la atención una hermosa vidriera construida en Amberes, con arreglo y dibujo del señor Achucarro, también la verja de la escalera, en el amplio descanso de este piso frente a la vidriera destaca un gran espejo, que con los cambiantes de luz produce efectos sorprendentes.
A la izquierda subiendo el salón de "tomar" así llamado por los socios, con dos separaciones para el juego del tresillo.
En el año 1888 gestiona y obtiene el Sitio la exención de quintas para los hijos de los auxiliares, vencedores del carlismo invasor.
La biblioteca de el Sitio, una de las más completas de Bilbao a cargo de Asensio Linacero. Ciencias exactas y física naturales 1149 obras, ciencias morales y políticas 1276 obras, derecho y legislación 1485 obras, geografía 997 obras, historia 1125 obras, literatura y bellas artes 3473 obras, obras diversas 2528 obras lo que hace un total de 12033 obras.
*La escocia dividida en diez y seis partes, es obra del laureado artista vizcaíno Anselmo Guinea, que consisten en escenas alegóricas representadas por niños.
En el mismo piso ocupa toda la longitud de la fachada el salón del tresillo, con decoración preciosa, elegantes columnas y magnífico artesonado.
En ambos pisos hay servicios indispensables.
Además se halla el salón de juntas, modesto y de reducidas proporciones, donde se han hecho todos los preparativos para las fiestas.
En un extremo de la terraza en el piso tercero hay una habitación donde el pincel de Guinea ha deja trozos artísticos de mucho sabor local.
En el Palacio de la Libertad se congregan más de mil doscientos socios, unidos por la idea liberal, que atienden y obsequian con solicitud a los vasco-navarros que se han congregado para realizar una manifestación grandiosa como no se ha conocido desde la terminación de la guerra civil, dedicando un homenaje respetuoso a los héroes, cuyas cenizas están depositadas en el panteón de Mallona, cuya erección acordó el ayuntamiento el 26 de enero de 1866, al siguiente día de haber sido trasladados al cementerio los restos gloriosos que se conservaban en el antiguo e histórico convento de San Agustín.
Marcos Ordozgoitia construyó el pedestal del cementerio y el notable artista Bellver, los leones y atributos, la matrona que corona el monumento habiendo costado 70000 reales.
Se abrió un certamen para las inscripciones del monumento y se presentaron 218 pliegos, resultando premiado Julio Enciso, querido colega y amigo.
El 24 de mayo de 1870 se verificó con gran solemnidad la inauguración del monumento, concediéndose extraordinaria importancia al acto, a causa del estado de agitación del país, que hacía presagiar una guerra civil.
Al descubrir el monumento el alcalde Félix Aguirre lanzó un ¡Viva España! que fue contestado por miles de personas que acudieron a la ceremonia.
Se acuñó una medalla de plata conmemorativa del acto que existe en lugar preferente de la alcaldía y se entregaron medallas iguales de bronce a los veteranos.
Durante el último sitio de Bilbao, sufrió el monumento desperfectos que fueron reparados inmediatamente y en él se dio sepultura a los bravos forales, que murieron en la acción de Arbolancha de 1875 y los restos del general Castillo en 1895.
Al pie del panteón hay una losa con letras doradas: Al Excmo. señor Teniente General Ignacio María del Castillo, Conde de Bilbao y Gobernador de la plaza, durante el asedió que sufrió Bilbao el año 1874. La eterna gratitud del hidalgo pueblo de Bilbao, que si llora tu muerte contempla vivas a tus virtudes cívicas, sabrá conservar, cual cumple a su nombre, las cenizas que hoy deposita el 2 de mayo de 1895, R.I.P.
El zócalo del monumento es cuadrado de mármol rojo de Ereño, con contrafuertes en los cuatro ángulos, sobre cada uno de los cuales hay un león y tres banderas de piedra blanca.
La base del pedestal es también de mármol rojo y en cada uno de los lados hay una urna cineraria de piedra blanca y cuatro escudos pequeños, ostentando el de enfrente las armas de la villa. En las cuatro caras de esta base hay placas de mármol negro, en la del frente se lee: Bilbao a sus hijos predilectos que le conquistaron el título de Invicta. En la derecha: Se sacrificaron por la libertad de la patria. En la parte zaguera: Cumplieron como buenos su deber. Y en la parte izquierda: No los lloréis, imitadlos.
El dado o pedestal propiamente dicho es de mármol rojo con panales de mármol blanco. En el frente se lee: Para honrar la memoria de los valientes que sucumbieron defendiendo las instituciones patrias de esta Villa, su Ayuntamiento mandó erigir este cristiano panteón que guarda piadosamente sus venerables reliquias y muestra como ejemplo a la generación venidera, su abnegación y su heroísmo, Mayo 1870.
En el de parte zaguera; Yacen en este panteón los restos mortales de los valientes soldados forales y auxiliares que defendiendo la Invicta villa y la Libertad, murieron en el puesto de honor en el sitio de 1874, emulando el ejemplo de sus predecesores en los años 1835 y 1836. El Ayuntamiento de Bilbao les consagra este recuerdo R.I.P.
Corona el monumento una matrona con diadema mural, de piedra blanca que representa la Libertad, tiene los brazos levantados, con dos coronas de bronce en la mano derecha y una en la izquierda como ofreciéndolas a los mártires. Al pie de la matrona hay un áncora, atributo de la esperanza del premio que han de recibir los héroes.*
LAS COMPAÑÍAS DE AUXILIARES EN 1874.
Fueron ocho compañías, cada una se componía de un capitán, un alférez, un teniente, sargento de primera y dos sargentos de segunda, luego los cabos, dos cornetas y finalmente los voluntarios.
El capitán de la primera compañía se llamaba Juan Recacoeche, el de la segunda compañía Antonio Zuazo, la tercera compañía Mariano Montiano, la cuarta compañía Pablo Díez, en la quinta compañía Victoriano Borda, en la sexta Guillermo Celayaran y de alférez Seve el arquitecto Severino Achúcarro, en la séptima compañía Luciano Urizar y de teniente Pedro Mac-Mahon y por último la octava compañía el capitán José Aranaga.
COMO SE CELEBRABAN EN LOS DISTINTOS AÑOS,
LA FIESTA DE LA LIBERACIÓN:
Se hicieron tres espadas para los libertadores del Sitio de Bilbao, los generales Francisco Serrano, Manuel Gutiérrez de la Concha e Ignacio María del Castillo.
La espada del general Concha era de oro de 18 kilates y 22 kilates, las empuñaduras y costó 8197 pesetas. La del general Serrano 7610,50 pesetas y la de el general Castillo 7282,50 pesetas.
Se hicieron en Barcelona, J. Serra y Gibert en la calle Alta de San Pedro, 15. el proyecto y dibujo de las espadas costó dos mil pesetas de fecha 20 de noviembre de 1874, todo ello por encargo de Felipe Uhagón alcalde de Bilbao.
LA ENTRADA EN BILBAO DEL GENERAL FRANCISCO SERRANO. |
Año 1875, el primer aniversario se celebró con gran solemnidad, en el Teatro de la villa y en los diferentes círculos se celebraron actos conmemorativos, Julio Enciso, Ricardo Becerro, Eusebio Sierra, Antonio Fernández Grillo y otros leyendo poesías.
Se celebró una procesión cívica y poco después un Te Deum , en la basílica de Santiago.
Desfilaron las fuerzas de la guarnición y los auxiliares, en el salón del ayuntamiento, pronunciaron los discursos el alcalde señor Uhagón, el comandante general señor Jiménez Sandoval y el gobernador civil don Francisco Mac-Mahón.
La artillería lanzó salvas de honor y se celebraron infinidad de banquetes y romerías por las cercanías de Bilbao, siendo la animación extraordinaria.
En el año 1875, se celebró un baile en el salón de recreo de la calle Jardines, por ser el primer aniversario de la liberación de Bilbao.
No es para describirlo, es menester verlo para comprenderlo.
El contento y animación de aquellas gentes, el coro celestial de bellísimas bilbaínas. ¿Cómo darte una idea de la hermosura de aquellas hijas del Nervión?.
El presidente de la galante comisión que organizó el baile se llama, Faustino Zugasti fue alcalde de San Vicente de Abando y comerciante, de una exquisita discreción y finísima amabilidad.
Al entrar en el salón, se ve el buen gusto aquel fresco y ameno bosquecillo colocado en el escenario, con aromáticas flores y caprichosas plantas, se escuchaban los armoniosos ecos de la orquesta.
Una fuentecilla artificial y los bustos de Rossini y Beethoven, el salón estaba concurridísimo, por todo lo más notable y escogido de Bilbao.
Se escuchaban los ecos de la música tocando un delicado rigodón o un rápido vals y las animadas señoritas bailan acompañados de sus respectivas parejas.
En ese año, el Bilbao cotidiano se sorprendió con la aparición de un nuevo periódico, fue el 8 de enero de 1875 y se llamaba El Noticiero Bilbaíno.
Su director Tomás Manuel Echevarría y Torres, logroñés de treinta y cinco años, el periódico dice que no quiere tomar parte en las luchas que trastornan a nuestro país, digna de mejor suerte, sino tener al corriente a nuestros lectores con absoluta imparcialidad de los acontecimientos de España y el extranjero.
En 1875 existía un "ingenuo" café que trato de sanar las heridas bélicas recientes, era albergue peregrino, fueron muchos los que pasaron por él.
Pero unas diligencias de embargo acabaron con la vida de ese café, que se llamaba el Buen Retiro en la calle Santa María cuatro.
Su dueño León Carrasco debe 3212 pesetas, taburetes, cortinas, papeles pintados y otros elementos decorativos, el reclamante José Gaminde que tenía un almacén de muebles.
Pero había otros lugares donde los bilbaínos solían acudir el Campos Elíseos que era un lugar más elegante, bullicioso y con más distinción.
El saló Iturribide, luego llamado de el Recreo que estaba en la calle Iturribide, con espectáculos y variedades, fue inaugurado el 7 de noviembre de 1869, estaba situado donde estuvo el Teatro Gayarre, a la entrada de la calle. Las señoritas no pagaban y en el ambigú se servían bebidas alcohólicas.
El salón de la Amistad, frontón con ese nombre en la calle de la Amistad, partidos de pelota por las mañanas los domingos y luego al caer la tarde los bailes en el frontón.
En el año 1876, el Ayuntamiento organizo una función religiosa en la basílica de Santiago. En el ayuntamiento el alcalde señor Uhagon pronuncio un discurso, además del comandante militar de la plaza y el gobernador civil. Se celebraron diversos festejos populares y fiestas literarias.
El Himno de los Auxiliares de Bilbao, lo compuso el señor Manuel Villar y se halla a la venta en la Biblioteca y Escuela Musical.
Año 1877 Disparo de morteros el 1 de mayo. El día dos repique de campanas, Te-Déum, concierto y cucañas el Arenal.
Discurso del alcalde Pablo Alzola y del gobernador militar Ramón de Ciria. Fuegos de artificio, iluminación y conciertos públicos.
Año 1878, la víspera repique general de campanas y concierto. El día amaneció con dos disparo de salvas de artillería, Te-Déum en Santiago, a las doce en el ayuntamiento hablaron el alcalde Pablo Alzola, el gobernador interino José Mallo, por la tarde cucañas y regatas de botes en la ría.
Año 1879, este año el ayuntamiento organizó la procesión cívica que por primera vez subió a Mallona, depositando en el mausoleo de los héroes de la Libertad, una corona de flores naturales.
En la capilla esperaba el clero con una cruz parroquial. Se cantó un responso y el Pater Noster de Meyerbeer.
Habló el alcalde Pablo Alzola y el gobernador civil.
Llevaron coronas El Sitio, el Club de Regatas, La Unión y un grupo de auxiliares. A la tarde y a la noche hubo diferentes festejos y conciertos.
Año 1880, organizó el ayuntamiento diferentes festejos populares, distribuyéndose donativos entre los menesterosos. La procesión cívica subió a Mallona, depositándose coronas de flores del ayuntamiento, el Sitio, los zapadores, los auxiliares.
Inició los discursos el señor Lecanda alcalde de Bilbao.
Entregaron las coronas el señor Sacristán por los auxiliares, el señor Borda por las damas bilbaínas, el señor Irigoyen por la Sociedad el Sitio, el señor Vivanco por los zapadores.
Después hubo romerías y conciertos públicos.
Año 1881 En el panteón de los héroes de la Libertad, se depositaron coronas de flores, por el Ayuntamiento, el Sitio, los Auxiliares y los Zapadores.
Se cantó el Parce Mihi Dómine de Hilarión Eslava, por el coro de la Academia Musical,
Pronunciaron discursos Manuel Lecanda, alcalde de Bilbao, el gobernador Ramón de Ciria, el señor Sacristán y otros.
A la noche se quemaron fuegos artificiales, romerías y conciertos.
Año 1882, Fueron depositadas cuatro coronas. El clero cantó un responso y los alumnos de la Academia Musical el Pater Noster de Meyerbeer.
El alcalde era el señor Victoria de Lecea, Luis Sacristán comandante del batallón de Auxiliares, Luis Sacristán, Federico Solaegui, Benito Goldaracena representando a el Sitio, todos ellos pronunciaron unos discursos. Federico Solaegui habló representando a los demócratas.
En la basílica de Santiago se celebró un Te Déum y en el Arenal un concierto que estuvo mu animado.
AUXILIARES EN LA CÁRCEL DE LARRÍNAGA, AMENIZANDO LA GUARDIA. |
Año 1883, se depositaron diversas coronas de flores en el panteón, hablando el alcalde señor Victoria de Lecea. Se celebró un Te-Deum y el discurso del alcalde mereció un voto de censura de la Diputación.
En vista de ello el concejal Fermín M. de Rivero presentó una moción proponiendo que el Ayuntamiento hiciera suyo el discurso del alcalde y que rompiera relaciones con la Diputación.
Se aprobó por aclamación y el alcalde Eduardo Victoria de Lecea, fue obsequiado con un banquete.
Año 1884, la clásica procesión y las coronas de flores hasta el cementerio de Mallona, con el Ayuntamiento, las damas bilbaínas, habló el alcalde el señor Eduardo Victoria de Lecea y el señor Sacristán. Se quemaron fuegos artificiales, iluminaciones, conciertos y veladas literarias.
Año 1885, las bandas de Santa Cecilia, la Artística y la del Regimiento de Zamora recorrieron las calles de la villa.
Se llevaron coronas de flores a Mallona el día dos de mayo.
Hablaron Victoria de Lecea, Luis Sacristán y el presidente de el Sitio el señor Sagarminaga, hubo a la tarde noche romerías y concierto, las romerías de disfrutaron durante toda la noche y estuvieron muy animadas.
Asistió el señor Federico Moyua y los Condes de Bilbao, el señor Gabilondo por los liberales donostiarra y el señor Rezola por los voluntarios de San Sebastián.
En la calle Bidebarrieta se suscitó un incidente, se creyó escuchar al pasar la comitiva manifestaciones de desagrado por parte de los bizcaitarras subiendo varios militares al local destrozando la bandera nacionalista que estaba a media hasta, con crespón negro.
Año 1886, don Vicente Urigüen ofreció la corona del municipio, acompañado por el presidente de el Sitio Pedro Sagarminaga y de los Auxiliares el señor Sacristán. Se cantó un Te-Déum en Santiago, estando presentes todas las autoridades.
Año 1887, la procesión cívica la organiza el Ayuntamiento ofreciendo las coronas el alcalde señor Urigüen, el presidente de el Sitio Miguel Uribarri , una representación de damas bilbaínas y los zapadores. Hubo salvas de artillería y fuegos de artificio, con romerías populares, además del consabido Te-Déum.
En el año 1888, fue enterrado en el cementerio de Mallona Juan Díez Cordero, carabinero liberal que se distinguió por su arrojo hasta enero de 1874 que cayó en manos de los carlistas.
Se le concedió el grado de alférez y fue enterrado con todos los honores.
Decía una bilbaína: Mil años que viviese no le olvidaría.
Juan Díez Cordero, aquél benemérito
carabinero que expuso su vida para
traernos el parte del próximo levantamiento
del cerco, es un héroe a quien debemos gratitud.
Yo como buena cristiana y bilbaína
le recordaré siempre en esta fecha.
¡Loor a aquél bravo y que Dios haya
premiado sus virtudes militares!
El alcalde era don Celestino Ortiz de la Riva, que ofreció un buen discurso, en el acto de Mallona, hubo más gente que en anteriores ocasiones, por el Sitio estuvo su presidente Eduardo Delmas.
Año 1889, habló en Mallona el alcalde interino José María de Lizana, don Raimundo Real de Asúa por los Auxiliares y el presidente de el Sitio Santamaría. La lluvia de la noche deslució algunos festejos populares, haciendo que la gente se refugiase en cafés y sociedades.
Año 1890, en la historia de el Sitio ocupa lugar preferente la visita de un hombre de la talla política, del jefe del partido liberal don Práxedes Mateo Sagasta, acudió a un baile organizado en los viejos jardines de los Campos Elíseos y el ilustre invitado fue colmado de atenciones y se le nombró socio honorario.
En Mallona la corona de flores la ofreció don José María Lizana, marqués de Casa-Torre. El alcalde que hizo la entrega de la corona, era José María Solaun.
El señor Real Asúa por los Auxiliares, Ricardo Arana como vice-presidente de la Sociedad el Sitio.
Se iluminaron las sociedades el Sitio, La Amistad, el Club de Regatas, el Banco Bilbao y el Ayuntamiento
Año 1891, este año la sociedad el Sitio encargó el ofertorio de su corona al abogado Julio Guiard, quién pronunció un gran discurso siendo muy felicitado.
En nombre de los Auxiliares habló el señor Real de Asúa y por el ayuntamiento lo hizo el alcalde José María de Solaun, durante el día se celebraron los acostumbrados festejos populares.
Año 1892, el párroco de Santiago y el clero en conjunto cantaron el responso en Mallona y después ofrecieron las coronas el alcalde señor Gregorio de la Revilla, el señor Real de Asúa y el señor Palacio en nombre de el Sitio.
Muchos edificios fueron iluminados y no faltaron los festejos populares
LA OCTAVA COMPAÑÍA DEL BATALLÓN DE AUXILIARES, AL MANDO EL CAPITAN JOSÉ ARANAGA, EL TENIENTE NICOLÁS LAPEYRA Y EL ÁLFEREZ JOSÉ ARANA BASAÑEZ.FOTO DE EL ARCHIVO DE LA DIPUTACIÓN FORAL DE BIZKAIA. |
Año 1893, Ofrecieron las coronas el alcalde señor Gregorio de la Revilla, el señor Real de Asúa, el capitán Florales, Luis López de la Calle, don Cosme Palacio en nombre de el Sitio.
En el teatro se celebró una velada literaria y en las calles romerías populares.
Año 1894, En este aniversario se celebró con gran solemnidad.
Hablaron en el cementerio el alcalde el señor Olano, el señor Real de Asúa, el señor Goldaracena por el Sitio, el señor Calle por los Forales, don Ignacio Felguera por los Carabineros, el señor Solaegui por los republicanos. La Sociedad el Sitio organizó una velada en sus salones y en la ría hubo cucañas, fuegos artificiales y romería.
Año 1895, en este año se trasladaron al panteón de Mallona los restos mortales del General Castillo, teniendo la fiesta una gran solemnidad.
Llevaron coronas de flores, la Juventud Republicana, los Auxiliares, los Forales, el Casino Republicano, la Sociedad el Sitio.
Hablaron Emiliano Olano alcalde de Bilbao, Raimundo Real de Asúa (auxiliar), Goldaracena presidente de el Sitio, Federico García republicano, Julio Anítua foral, Juan Buisán republicano y el Conde de Bilbao que era el hijo del general Castillo.
Año 1896, la fiesta la organizó el ayuntamiento de Bilbao, el alcalde Emiliano Olano que pronunció un buen discurso, representando a los auxiliares el señor Real de Asúa y el presidente de el Sitio Ricardo Arana.
Hubo romerías y otros festejos populares.
Año 1897, habló el alcalde de Bilbao Moreno Goñi y Real de Asúa por los auxiliares, el señor Arana por el Sitio, el señor Galina por los republicanos y el señor Anitua por los forales.
Año 1898, el señor Uruñuela ofrendó la corona del ayuntamiento, el señor Moreno Goñi, por los Auxiliares Real de Asúa, habló el jefe de los miñones, el presidente de el Sitio, don Ángel Uría y se celebraron varios festejos populares.
Año 1899, Felipe Alonso Celada, alcalde del ayuntamiento pronunció un discurso y seguido Ángel Uría por el Sitio, Real de Asúa, el señor Galina por los republicanos y Anitua por los forales.
Año 1900 La fiesta la organizó el ayuntamiento de Bilbao, Felipe Alonso Celada, ofreció la corona del ayuntamiento y hablaron los señores Real de Asúa, Zuazo, Anítua y Vidaña. Los festejos tuvieron gran animación.
MARCO GARDOQUI, ERA EL ALCALDE DE BILBAO DIRIGIÉNDOSE AL PÚBLICO CONGREGADO EN LAS ESCALINATAS DEL AYUNTAMIENTO, EN EL AÑO 1913. |
Año 1901 Se celebró la Fiesta de la Libertad, en medio de fuertes aguaceros, viéndose muy desanimada la causa. En Mallona habló el alcalde Alonso de Celada, Anitua comandante de los forales, el señor Sacristán vicepresidente de el Sitio y el señor Galina por el Casino Republicano.
Año 1902 la fiesta la organizó el Sitio, por no querer hacerla el ayuntamiento. En trenes especiales llegaron a la villa personas de Guipuzcoa, Álva y Navarra.
El alcalde ofreció las coronas, el señor Villasante, en el cementerio de Mallona.
De cinco a ocho verbena en el Arenal con carreras de Samaritanas, a las seis se correrán dos novillos, uno por las calles del Casco Viejo y otro por el Ensanche.
A las ocho se reunirán en el Sitio los liberales de los pueblos de las provincias vasco-navarras y los socios poco después de las ocho y media, donde se organizará una procesión cívica que se dirigirá al ayuntamiento y después al cementerio de Mallona.
A su regreso el consabido Te-Deum en la Basílica de Santiago.
A las cuatro de la tarde corrida de toros.
Por la noche iluminación, música en el Arenal y romería en la Plaza Vieja.
En el Circo del Ensanche habrá función por la tarde y por la noche.
Año 1903 en el cementerio de Mallona, habló el alcalde señor Pedro Bilbao y otros distinguidos señores.
Por primera vez los republicanos depositan en la tumba de Cosme Echevarrieta sendos ramos de flores, al gran hombre y consecuente republicano. Don Manuel Unzurrunzaga glosó la figura de Cosme Echevarrieta, dijo nuestro maestro y nuestro orgullo.
Año 1904, este año se ha dado gran importancia a la procesión cívica. Pronuncio un discurso Enrique Goñi primer teniente alcalde, Federico Echevarría, José Torre, José Cruceño, Federico Solaegui, Fernández Peñafiel. Por la agrupación hablo por primera vez habló un socialista, era la primera vez que participaba en esta fiesta, se llamaba Felipe Villarreal, el discurso fue en tonos cálidos y radicales.
Emilio Felipe por la agrupación socialista, tomo parte en la fiesta.
Año 1905, hablaron en Mallona Pedro Bilbao el alcalde, Casimiro Acha, Auxiliar. El señor Hervías por la Sociedad el Sitio, Anitua por los Miñones, Solaegui por los republicanos, Felipe Carretero por la Agrupación Socialista.
Entre los socios del Círculo de la Unión Mercantil e Industrial, se suscitó un incidente por si debían de colocar o no las colgaduras de la Sociedad en atención a la fecha.
Año 1906, en este año la fiesta de la Libertad revistió excepcional importancia por tomar parte en ella, el ministro de la marina el señor Concas, habló también el alcalde don Gregorio Balparda, Casimiro Acha alcalde de Vitoria, el señor Ordoño el alcalde de Pamplona, los señores Viñas y Julián Salazar representando al Ayuntamiento de San Sebastián, el señor Solaegui como jefe de los miñones.
Al final de todo el acto habló el ministro de marina.
FUERTE DE SAN AGUSTÍN, DONDE HOY ESTÁ EL AYUNTAMIENTO DE BILBAO, DEFENDIDO POR LOS LIBERALES. ARCHIVO DIPUTACIÓN FORAL DE BIZKAIA. |
Año 1907, el señor Gregorio Ibarreche (1907 a 1909) fue el primer alcalde nacionalista en Bilbao. Este señor no asistió a la procesión cívica. Ofrecieron la corona Nicolás Bengoa, Juan Montes auxiliar, Vicente Torre de el Sitio, Anitua que era jefe de Miñones y Juan Buisán en representación del partido Republicano.
Año 1908
En diciembre del año 1908, después de un sencillo lunch, don Segismundo Moret en un carruaje se dirigió hasta la sociedad el Sitio, la escalera estaba adornada con plantas y colgaduras. Se veían los retratos colgado de don Canuto Azcue y de el general Castillo,
Al aparecer en el salón de fiestas, el jefe del partido liberal estalló una cerrada ovación, el señor Montes era entonces presidente de la sociedad.
A las seis y media de la tarde don Segismundo Moret, estaba en la Diputación, la recepción fue muy breve, porque se había previsto una conferencia de Moret después del lunch.
El salón estaba atestado de gente desde las seis de la tarde.
Entró en el salón el señor Moret, escuchándose entonces el Himno de los Auxiliares.
Al jefe del partido liberal, con la junta directiva le recibieron con una formidable ovación.
El señor Montes hizo la presentación, felicitando al orador por salir ileso de un accidente de tren, que sucedió en su viaje a Bilbao.
En las Calzada de Begoña vieron al llegar varios carteles que rezaban así ¡ Viva Carlos VII! ¡Viva España con Carlos VII! y Viva Cristo, pintados por jóvenes carlistas.
En el cementerio habló el primer teniente de alcalde Nicolás Bengoa, después Cándido Palomo, Julio Anitua y Jerónimo Santa María.
En el panteón de Cosme Echevarrieta depositaron los republicanos diversos ramos de flores.
Año 1909 a 1911 durante esos años fue presidente de el Sitio don Gregorio Balparda y anteriormente alcalde de Bilbao.
El día dos de mayo fue domingo y se celebraron elecciones municipales, quedó aplazada la fiesta hasta el domingo siguiente.
Estos años son especialmente difíciles para Bilbao, ante la imposibilidad de que empresarios y obreros lleguen a un acuerdo.
El ejército se emplea en Bilbao con extrema dureza, hay en huelga con más de dos mil obreros de toda Bizkaia.
Año 1912, se juntan la fiesta del trabajo y al día siguiente el dos de mayo. Repicaron las campanas, la banda municipal y la de Garellano recorren las calles de Bilbao cantando el himno de los Auxiliares, en la plaza del Mercado se celebra una concurrida romería.
El edificio de el Sitio aparece iluminado y en todo su esplendor, a la noche una escogida velada musical, después se canto aires de el Sitio, con gran animación hasta la madrugada.
Año 1913, el alcalde de Bilbao don Federico Moyua asistió al acto, con Eliseo Migoya Torre, prestigioso abogado nacido en Bilbao en 1881. Fue una personalidad monárquica, miembro de el Sitio, director de la Caja de Ahorros Municipal de Bilbao.
Catarineu que pertenecía al partido Liberal y Bengoa por los Republicanos.
Las banderas de los Sitios estaban depositadas en el Ayuntamiento de Bilbao y las portaban, Cándido Palomo y Juan Llaguno.
Acompañó el acto la banda municipal de Portugalete, por el cuerpo de los Auxiliares depositaron la corona los señores Arturo Arana, Santiago Artiach y Vicente Balanzategui.
AÑO 1916
El dos de mayo de 1916 se asoció a la fiesta Benito Pérez Galdós, con el vinieron Ramón Pérez de Ayala, Emilio Méndez Pallarés .
También socio de el Sitio, Antxón Bandrés, en el listado de socios figuraba como socio número 934. En la foto oficial de ese día aparece Benito Pérez Galdós con un jovencito Indalecio Prieto.
Diana, verbena, procesión cívica por las calles de la villa, soldados del regimiento de Garellano participaron en el acto, en la procesión se pudo ver Indalecio Prieto y a Ortiz de Viñaspre, el señor Bárcena el presidente de el Sitio, el coronel de Garellano señor Echagüe, el gobernador civil el señor Queipo de Llano,
Los abanderados de el Sitio don Cándido Palomo y Zuazo.
De despedida se cantó el himno de Riego, en el estrado presidencial estaban Benito Pérez Galdós, Pérez de Ayala y Méndez Pallarés.
En su discurso Pérez de Ayala habló de el "Espíritu Liberal" .
Año 1917, el buen tiempo favoreció la asistencia al acto cívico.
Hubo gigantes y cabezudos, en la plaza de Arriaga se tragaba a todos los niños que por allí se acercaban.
Salió la procesión del ayuntamiento con el acompañamiento de tamborileros y atabales, la banda de música municipal y la de Santa Cecilia.
La Juventud Republicana coloco una corona en el panteón.
Te-Deum en la iglesia de Santiago organizado por el Círculo Conservador, asisten los concejales entre otros Bandrés, Merodio y Carretero, con el alcalde interino Aranguren Gallastegui.
Los abanderados Calixto Zuazo y Cándido Palomo.
Los Auxiliares depositaron una corona ante la tumba confeccionada con lilas, claveles y una variedad de rosas naturales, hicieron la ofrenda Alfonso Herrán y Mariano González.
Por el Sitio la ofrenda fue de una corona de lilas, claveles y mimosas.
Año 1924, en mayo de ese año llega a Bilbao el General Primo de Rivera, el recibimiento fue apoteósico mucho mejor de lo que se esperaba.
Vino entre otras cosas a conmemorar el cincuenta aniversario de la sociedad el Sitio. Fue él, el que encabezó la procesión cívica hasta las Calzadas de Mallona, junto con el alcalde Federico Moyua y el presidente de el Sitio en funciones el doctor don Vicente San Sebastián.
El doctor San Sebastián se levanto del asiento diciendo que el caluroso recibimiento al general Primo de Rivera, no era cortesía sino agradecimiento al general.
Dijo que entre los miembros de el Sitio hay elementos heterogéneos.
Se me puede acusar de tirano, pero tengo el deber de recoger todas las ideas, pero por encima de todo está el respeto a las personas.
Como médicos somos tiranos algunas veces con los pacientes, pero esa tiranía consiste en aconsejar al enfermo, que esté quieto, que no piense, que no discurra, ¡Para que sirve! para que yo piense, trabaje y discurra con más fuerza.
Homenaje a la mujer bilbaína:
El alcalde hablo en su discurso del "Heroísmo de las mujeres durante el Sitio"
Ciento treinta comensales reunidos en la Sociedad Bilbaína reunidos conmemorando la ocasión. Una vez terminada la comida pasaron a los solones de el Sitio y un sexteto amenizo la celebración, juntos el general, el alcalde y el doctor San Sebastián, un nieto del General Castillo asistió a la fiesta y otro del General Salazar y Mazarredo.
Se descubrió una lápida en recuerdo del don Felipe Uhagón que fue alcalde de Bilbao en los años más duros, desde el 3 de enero de 1874 al 14 de febrero de 1877 y fallecido el 24 de abril de 1890.
Un paseo por la Gran Vía de Bilbao y el General Primo de Rivera hizo un elogio de la belleza de las mujeres de Bilbao, para marchar posteriormente al Club Nautico, en el Teatro Arriaga desde donde pronunció un discurso al público allí congregado.
A la tarde el general Primo de Rivera y el general Echagüe asistieron a una corrida de toros.
En el año 1925 el doctor Vicente San Sebastián siendo presidente de el Sitio, acude a visitar a don Federico Moyua, alcalde de Bilbao para cambiar el nombre de la plaza del Instituto, por la plaza de los Auxiliares y se consumó el cambio de nombre.
La Sociedad el Sitio llegó a tener hasta mil socios, para ser alguien en Bilbao había que ser de dicha sociedad. Había un comité de aceptación, donde no se admitía a cualquiera, conducta moral, comportamiento cívico y su ideología política que no fuera incompatible con la causa liberal.
Existían serias rivalidades entre el Sitio y la Sociedad Bilbaína, con el ajedrez y el billar serios rivales durante años.
EN EL ARENAL REVISTA DE TROPAS AUXILIARES FOTO DEL ARCHIVO DIPUTACIÓN FORAL DE BIZKAIA. |
PERSONAJES QUE PASARON POR LA SOCIEDAD, EL SITIO:
Ocuparon tribuna personalidades tan señeras como Dato, Bergamín, Osorio y Gallardo, Segismundo Moret, Azcárate, Unamuno, Ortega y Gasset, Ramiro y María de Maeztu, Alcalá Zamora, Azaña, Besteiro, Prieto, Pérerz Galdós, Pérez de Ayala, el Conde Romanones, Antxón Bandrés.....
Las charlas de Melquiades Álvarez la crisis del marxismo, José Canalejas conceptos del estado, Miguel Unamuno dio su primera conferencia con 22 años, en 1886, la conciencia liberal y española de Bilbao, Espíritu de raza vasca, el espíritu liberal de Bilbao, la cruzada de los Habsburgo.
Segismundo Moret la historia de los sitios, Gumersindo Azcárate que habló de la religión y las religiones.
Años 1910, Emilio Menéndez Pallarés, Adolfo Buylla, José Ortega y Gasset, Álvaro Albornoz, Augusto Barcia. Joaquín Dicenta sobre la moral y el teatro, Carmen Burgos "Colombine" misión social de la mujer y Alejandro Lerroux como hago política, Rafael Altamira, Manuel B. Cossio, Jacinto Benavente, Rafael Gasset que fue ministro de fomento, Eugenio Noel el genio de pueblo.
Ortega y Gasset en 1914 volvió a ocupar la tribuna para exponer el juicio que le merecía, la destitución de Miguel Unamuno del cargo de rector de la Universidad de Salamanca, decretado por el señor Bergamín. Formaban turno de conferenciantes Simarro, Alcalá Zamora y Rodés, pero la primera guerra mundial desbarató los proyectos culturales de la sociedad.
Pero esa misma guerra dio pie a conferenciantes como Eugenio D ´Ors, Aureliano Beruete las majas de Goya y los Caballeros del Grec
La sociedad conmemora como festividad propia, el 25 de diciembre de 1836 y el 2 de mayo de 1874, sobre todo esta última con un Tedeum en la Catedral de Santiago y una procesión cívica hasta el cementerio de Mallona, donde se encuentra el monumento a los defensores liberales de Bilbao y con corridas de toros.
Al estallar la guerra civil de 1936, la sociedad tomó partido por la causa republicana.
Con fecha 14 de agosto de 1938 el régimen franquista decretó la incautación de la sociedad con todos sus bienes, que fueron adjudicados al ayuntamiento en una subasta de dudosa legitimidad, que instaló allí la actual Biblioteca Municipal de Bidebarrieta, sin que hasta la fecha se halla hecho nada.
U n 1980 un grupo de intelectuales bilbaínos encabezados por Alfonso Carlos Saiz de Valdivielso, reconstituyó la sociedad.
La sesión inaugural fue el 28 de enero de 1981.
Con la intervención del citado señor, Fernando García de Cortázar, Juan Pablo Fusi, Aizpurúa. María Jesús Vergara y el crítico musical Sabino Ruiz Jalón, bajo la presidencia de Gregorio San Juan.
EL REGLAMENTO DE LA SOCIEDAD
Del 19 de marzo de 1875, siendo presidente de la sociedad, don Canuto de Azcue, el tesorero Isidoro Rotaeche, el secretario Benito Gardoqui.
PRIMER ARTÍCULO: Esta sociedad tiene por objeto el recreo.
SEGUNDO ARTÍCULO: Se compondrá de individuos inscriptos que admiten el reglamento.
TERCER ARTÍCULO: El número de socios es ilimitado.
CUARTO ARTÍCULO: Todo individuo que desee ingresar , merecerá la aprobación de la comisión, no pudiendo acceder si hay dos en la comisión que no lo aprueban.
QUINTO ARTÍCULO: El nombre del candidato a presidente se presentará por un socio de la junta directiva.
SEXTO ARTÍCULO: La cuota mensual que se debe satisfacer, será de cuatro reales de vellón.
SÉPTIMO ARTÍCULO: Ningún socio que haya sido despedido tendrá derecho de reclamación de los enseres adquiridos por la sociedad.
OCTAVO ARTÍCULO: Si llegase a desaparecer la sociedad, se abonará o distribuirá a prorrateo entre los socios que a su disolución figuren como tales.
NOVENO ARTÍCULO: Queda prohibido todo juego de azar o embite, será despedido de la sociedad.
DÉCIMO ARTÍCULO: La Junta Directiva oirá y resolverá las cuestiones que se planteen, concernientes a la sociedad.
ONCE ARTÍCULO: La Junta Directiva, se compondrá de un presidente, un tesorero, un contador, un vocal y un secretario, que serán nombrados y votados por los socios.
DUODÉCIMO ARTÍCULO: Los socios están obligados a guardar orden, moralidad y obediencia.
ARTÍCULO DÉCIMO TERCERO: Queda terminantemente prohibido la discusión política.
ARTÍCULO CATORCEAVO: El socio que por indolencia no llegara a satisfacer la tercera cuota, será despedido.
LOS SOCIOS FUNDADORES
Los socios fundadores liberales, todos de buena cepa, fueron los siguientes: Canuto Azcue, Isidoro Rotaeche, Benito Gardoqui, Francisco Basterra, Fernando Mieg, Francisco Castillo, Plácido García, Antonio Arasola, Pascual Sagarduy, José Gaminde, Sotero Gaminde, Isidoro Gaminde, Julián Torre, Miguel Uríbarri, Tomás Echevarría, Blas Emparanza, José Elizondo, Pablo Gorriarán, Calixto Leguina, Tomás Rovira, Dionisio Echevarría, Domingo Sagarmínaga, Darío Latapi, Benigno Madariaga, José Arrolo, Francisco Ocerin Jauregui, Eduardo Eguía, Antonio Alambra, Joaquín Ituarte, Miguel Ormaechea, D. Alfredo J. Beardmore, Aureliano Jauffret, Manuel Elguezabal, Ángel Uría, Antonio Amonátegui, Julián Ibarrolaza, Martín Gorostiaga, Francisco Bayo, José Martínez, Salvador Amilivia, que hacen un total de cuarenta y un socios fundadores.
PRESIDENTES Y SOCIOS HONORARARIOS
Presidente Horacio Echevarrieta.
SOCIOS HONORARIOS
Melquiades Álvarez
Miguel de Unamuno
Emilio Menéndez Pallares
George Clemenceau
David Lloyd George
Mariscal Foch
LOS PRESIDENTES
1876-77 CANUTO AZCUE
1878 ISIDORO ROTAECHE
1879 MIGUEL URIBARRI
1880 JOSÉ GAMINDE
1881 EMILIO IRIGOYEN
1882 CLAUDIO GARAY
1883 JORGE CASTIELLA
1884 TOMÁS ACHA
1885 LINO GARAY
1886 PEDRO G. SAGARMÍNAGA
1887 MIGUEL URIBARRI
1888 EDUARDO DELMAS SAGASTI
1889 SECUNDINO G. SANTAMARÍA
1890 RICARDO ARANA
1891 ANTONIO SAGARMÍNAGA
1892-93 COSME PALACIO
1894-95 BENITO GOLDARACENA
1896-97 RICARDO ARANA
1898-99 ÁNGEL URIA
1900-1 FRANCISCO RASCHE Y SAGARDUY
1902-3 SANTIAGO UGARTE
1904-5 JOSÉ CRUCEÑO
1906-7 VICENTE TORRE
1908 JUAN MONTES
1909-10-11 GREGORIO BALPARDA
1912-13 FRANCISCO ELIZALDE
1914-15 RAMÓN MADARIAGA
1916-17 JOSÉ ANTONIO BÁRCENA
1918-19 MARIANO TEJERO
1920-21 ARTURO ARANA
1922-23 JUAN ULPIANO MIGOYA
1924 FEDERICO ECHEVARRÍA Y ELISEO MIGOYA
1925 EL DR. VICENTE SAN SEBASTIÁN
ERNESTO TENÍA OCHO AÑOS Y LE LLEVABA LA COMIDA A SU PADRE.
SU PADRE SE LLAMABA JOSÉ ERCORECA MENCHACA Y VIVÍA CON SU HIJO LORENZO
EN BARRENCALLE BARRENA UNO QUINTO PISO. SU OTRO HIJO ERNESTO ERCORECA REGIL, VIVÍA EN LA CALLE ITURRIBIDE DOS Y EN EL CENSO ELECTORAL DE 1895, SE GANABA LA VIDA COMO DELINEANTE.
ERNESTO ERCORECA FUE CANJEADO DURANTE LA GUERRA CIVIL, EN SEPTIEMBRE
DE 1936 POR ESTEBAN BILBAO.
EL DOS DE MAYO DE 1931, EN BILBAO
En ese año, primero de la segunda República, la invicta villa celebra con extraordinario esplendor la acostumbrada procesión cívica en conmemoración de su heroica defensa contra los carlistas.
Que alegría ver retoñar en el corazón de los pocos ancianos que superviven de aquella fecha.
Año 1934
Nuestro presidente del Club Deportivo Bilbao, presidió la sociedad de el Sitio en el año 1934, sucediendo a Andrés Arzadun.
Permaneció en el cargo hasta el 1 de enero de 1936 sucediéndole en el cargo Fermín Luis Garralda Sodupe.
En 1935 se celebró el banquete de los supervivientes auxiliares en la sociedad el Sitio. Policarpo Hormaechea, Isidoro León, Restituto Goiri Luengas, José Eceiza, Carmelo Prat, Hilario Tamayo y Luis Landaida, estos fueron los que estuvieron presentes ese dos de mayo de 1935.
La procesión cívica recorrió las calle de la Sendeja, Correo, Sombrerería, Plaza de los Auxiliares y por las Calzadas hasta al cementerio de Mallona.
Discurso de el alcalde de Bilbao Pablo Barrena y tres vivas a la Libertad y a la República.
Tomó la palabra un viejo auxiliar Isidoro León, el presidente del Sitio, levantó la voz para decir que ¡Las ideas viven y vivirán siempre!.
Fue en el comedor particular de el Sitio, varios ex-presidentes de la Sociedad.
Un sexto de txistularis amenizó la fiesta ejecutando "Aires del Sitio" y el "Himno de los Auxiliares". El acto resultó simpático y terminó a las cuatro de la tarde.
Los viejos supervivientes fueron muy agasajados por la directiva.
EN EL AÑO 1936
En enero de 1936 vino a Bilbao Margarita Xirgú, actuaba en el Teatro Arriaga y también vino a la villa invitado por la sociedad el Sitio para recitar unas poesías, el poeta Federico García Lorca, que se hospedó en el Hotel Torrontegui. En ese recital intervino también Margarita Xirgú, el recital fue el 26 de enero de 1936 y un gran éxito de públicos, entregados a los dos personajes.
Durante la guerra civil la sociedad se dedicó a labores humanitarias, organizó un comedor para las familias de los evacuados, sobre todo de Guipúzcoa, con la entrada de los requetés en Bilbao, actuaron contra el símbolo de los más bilbaíno y quemaron la biblioteca de la sociedad el Sitio y la incautación del edificio.
La procesión cívica ese año la presidió el ministro de agricultura Ruiz Funes, el alcalde Ernesto Ercoreca, supervivientes de aquella gesta estaban Tomás Blanco del cuerpo de Forales de 1874, Juan Navarro Soler del Batallón de Cazadores de Ciudad Real, por el batallón de Auxiliares Casimiro Prat y Policarpo Hormaechea.
Discurso del alcalde con la presencia del señor Garralda presidente de la sociedad.
Desde la proclamación de la República, todos los participantes eran de izquierdas, moderada o radical.
Izquierda Republicana, partido Unión Republicana, Fraternidad de Mujeres Modernas, Unión Femenina Republicana, el Casino Republicano y el Frente Popular de Vizcaya.
En Zollo se reunieron entorno a una mesa para celebrar el dos de mayo, el ministro y todos sus correligionarios.
Algunos socios que concurrieron a la suscripción de obligaciones.
Con doscientas once obligaciones Antxón Bandrés Azcue, a 25 pesetas cada obligación.
Federico Aldecoa Alonso doscientas obligaciones.
Ángel Jiménez Eguizabal doscientas diez obligaciones.
Marcelino Ibáñez de Betolaza doscientas obligaciones.
El doctor Vicente San Sebastián doscientas diez obligaciones.
Francisco Rasche y López Briñas cuarenta obligaciones.
Gumersindo Artiach Echevarría cuarenta obligaciones.
Un total de 1945 obligaciones por un importe de 48.625 pesetas, quedando por suscribir 55 obligaciones.
Se prorratearon las cincuenta y cinco obligaciones, entre varios socios, el doctor Vicente San Sebastián, Antonio Bandrés, Ángel Jiménez Eguizábal, Sabino Ruiz y Francisco Rasche.
PERSONAJES DE LA SOCIEDAD EL SITIO
DOMINGO FERNÁNDEZ, en la actualidad ocupa el número uno en la lista de socios y él nos informa de las andanzas de quienes fueron sus amigos, durante la última guerra carlista, de a quienes y con quien luchó y las penalidades que paso. Domingo Fernández va camino de los ochenta años, al verle nadie leería en sus rasgos una edad tan avanzada.
En el Sitio no faltó ni un solo día, recuerda el brioso ímpetu de su alma liberal. Un día pensaron que el Arenal era un sitio adecuado para reunirse, discutir y charlar de nuestras cosas.
Decidieron constituirse en sociedad, ya llevaba algunos meses funcionando y yo ingrese en la sociedad con cinco o seis amigos, del batallón de auxiliares.
Aunque el reglamento decía que el centro era de recreo, teníamos avanzadas convicciones liberales.
En el año 1881 ya figuraba entre los primeros socios de el Sitio.
En la casa de Cochorro estuvimos algo mas de un año, luego al primer piso donde estaba el Café Barrera, en la misma calle Nueva esquina con la Ribera, donde estuvo el Casino Republicano y hoy el Club Cocherito. En el Café Barrera ya éramos unos doscientos socios, por lo tanto el local resultaba insuficiente.
DON CANUTO AZCUE EN ESOS AÑOS VIVÍA EN LA CALLE SAN FRANCISCO Y ERA VECINO DE FELIPE SERRATE QUE VIVÍA EN SU MISMA CALLE. |
Fue el primer presidente de la Sociedad el Sitio, bautizado el 19 de enero de 1824 en los Santos Juanes de Bilbao, sus padres Francisco que era jornalero y Cipriana Otaola los dos nacidos en Bilbao, el padre en 1800 y la madre en 1796. Canuto tuvo seis hermanos, uno de ellos murió al nacer, Nicasio.
Era un hombre de condición humilde se ganaba la vida como dependiente de comercio y más tarde de ordenanza de un banco.
Profesaba la ideología liberal y era el arquetipo de aquella ideología liberal, todos ellos eran muy abiertos y de ideas progresistas.
Se casó con Genara Uranga Amunariz, en San Nicolás de Bari el 8 de mayo de 1854 y tuvo tres hijos: Basilisa. María Esperanza y Juan Cruz.
En los tiempos de don Canuto, el primer presidente de el Sitio, fue Guillermo Uribe un celosísimo empleado de la sociedad, con treinta y seis años de servicio, desde que se inauguró el edificio en Bidebarrieta.
Junto a un veladorcito, muy cerca de la sala de billares, el piso bajo de la Sociedad el Sitio, estaba don Canuto tomando café.
Hace unos días le habíamos expuesto hacerle una entrevista, fue el primer presidente, el local que hoy ocupa el Sitio lo ocupaban unas tabernas, hoy es un elegante edificio en la calle más céntrica de Bilbao.
Nos sentamos al lado del que hoy es uno de los ancianos sobrevivientes del último y horrible periodo, de luchas fratricidas del siglo XIX.
Comenzó hablándonos de aquel famoso Tilo del Arenal, junto al árbol se congregaron, después de levantado el Sitio, las tardes de ocho a nueve para fumar un cigarrillo, para mantener una estrecha amistad personal, junto algunos de los numerosos y entusiastas defensores de las ideas liberales.
En la calle Nueva estaba la taberna de Cochorro, bien frecuentada ya durante el segundo sitio, por individuos del batallón de auxiliares.
Era un pequeño local donde catorce o diez y seis amigos se reunían, pagando cuatro reales de vellón al mes, tomaban unos chiquitos de vino y recordaban recientes sucesos, el modesto local estaba alumbrado por un humilde quinqué de petróleo. Toscas mesas de madera, remojando el gaznate con vino peleón.
Pero la taberna de Cochorro tuvo su importancia en la vida social de aquellos bilbaínos, junto con Chinostra, Paloca y Donato, los comisionistas, apoderados de casas mineras, hacían el chiquiteo a la hora de los "sagusares" por esas tabernas y al séptimo trago ya se ponían a cantar.
En el año 1907 la antigua y acreditada casa Cochorro, fonda, restaurante y taberna entre la calle Nueva y Jardines se traspasa por no poder atender por enfermedad, en el año 1907. Su dueño se llamaba por aquellos años José Uriarte.
Otros le cogieron el relevo, Chinostra que durante largo tiempo ha hecho las delicias de los bilbaínos, con la merluza frita, el bacalao en salsa roja, las angulas de la Isla y otros guisos exquisitos, rinde ahora culto a la cocina francesa.
¿Qué va a ser de nosotros?.
Seguirán Paloca, Donato y Cochorro, la nueva ruta que les marca Chinostra.
Solo falta que dentro de poco tiempo los chacolís de Patas, Patillas, Mari-Cruz o Caballuco se llamen merenderos y que en la fachada pongan unos carteles diciendo: On parle francais.
La taberna de Cochorro en 1908 la volvió a coger en traspaso Manuel López.
A los creadores de esta tertulia se agregaron otros amigos y se pensó en la conveniencia de encontrar otro más espacioso, se localizó un local que estaba encima del café de Barrera.
Pasado poco tiempo se fueron juntando unos cincuenta y nos fuimos a un local de la calle Jardines, que había servido hasta entonces de lugar de bailes, estaba junto a la fonda de Ocerin-Jauregui.
Seguía aumentando el número de socios y así se hizo junto al almacén de pianos del señor Dotesio, en la calle María Muñoz. Es un edificio recién construido y es muy grande, los socios vieron el reuma en perspectiva, no acudían pero seguían pagando las cuotas.
Don Juan Allende había construido por entonces, la casa en cuyos bajos esta el restaurante el Antiguo y fue alquilado por la sociedad durante algún tiempo. Pero ya se pensaba en construir un edificio propio, era una casa vieja que fue comprada y derribada para hacer el nuevo edificio el año 1890.
Sin embargo don Canuto Azcue cree que cualquier tiempo pasado fue mejor, así lo cree y siente nostalgia de aquellos humildes orígenes.
Don Canuto recuerda aquél viaje que hizo a Santander, antes del sitio de 1874, para la recogida y envío de 20.000 cartuchos, operación realizada con dificultades, por el formulismo del ramo de aduanas, las valiosas municiones llegaron a tiempo a Bilbao.
El vapor Oscar transporto hasta Bilbao la mercancía, pero un intencionado incendio destruyó el barco, pero la mercancía ya se había descargado. Luego los carlistas cerraron la ría con una cadena para impedir la navegación hasta Bilbao.
Don Canuto tiene abolengo de patriota y liberal, su abuelo contaba con ochenta años, cuando la invasión francesa, pidió que le embarcaran en una trincadura para combatir a los vasallos de Napoleón ya que su avanzada edad no le permitía formar parte de la guerrillas voluntarias. Su padre marchó a La Coruña hacia el 1823, para unirse a los núcleos liberales que en tierra gallega se mostraban enérgicamente hostiles al subir al poder un gobierno reaccionario.
Don Canuto es esclavo de la puntualidad y el cumplimiento del deber, es un hombre alto y seco, cuerpo erguido, arrogante, su brazo derecho nerviosamente extendido y de aspecto enérgico que tenía cuando nos decía: Que ahora la leal fraternidad escasea mucho y que en su época el amor a la libertad era más grande y profundo.
Recuerda con deleite las cosas y anécdotas de el Sitio, aquellos bailes, aquellas fiestas de primeros de mayo.
Se reunían los socios en el salón principal, entre los que había muy buenas voces y se cantaban los himnos de el Sitio, con gran fervor y entusiasmo. Las vísperas del dos de mayo eran sonadas.
Pero todo parece desaparecer, había entonces en la sociedad un lugar famoso, el cuarto de la Parra o el cuarto del vino, porque en sus paredes un pintor llamado Mens, había dibujado unas vides y unos aldeanos bailando el aurresku, era un lugar muy frecuentado por los socios.
Solían acudir los capitanes de barco Carlos Careaga y Rasche, quienes traían mucho tabaco de Inglaterra, que luego todos fumaban en el cuarto de la Parra, en larguísimas pipas de barro, con que gusto echaba el humo aquella simpática gente, pero el cuarto desapareció hace ya diez años.
En 1908, por el dos de mayo en las Calzadas de Begoña vieron al llegar la procesión varios carteles que decían así: ¡Viva Carlos VII, Viva España con Carlos VII, Viva Cristo! las pintadas eran de los jóvenes carlistas.
Don Canuto Azcue Otaola, murió el 3 de junio de 1914 a los 90 años.
En el panteón de don Cosme Echevarrieta se depositaron diversos ramos de flores por parte de los republicanos, pronunciando un sentido discurso don Cesáreo Jimeno, después en la Tertulia de Donato se reunieron los socios para celebrar el día.
En enero de 1912, un grupo de entusiastas socios de el Sitio, le hacen un homenaje y demostrarle el cariño que le profesan, socio honorario y número uno, representante del genuino espíritu liberal.
El acto se celebró en el amplio salón social de dicha sociedad.
El precio ocho pesetas y un sexteto amenizó la fiesta.
Don Canuto padre amantísimo y baluarte de la libertad frente al carlismo y los bizcaitarras.
Dentro de la sociedad no debe haber, ni republicanos, ni socialistas, ni conservadores solo defensores de la libertad.
Se pidió una pensión para él, para que pueda vivir tranquilo sus últimos años.
Canuto lanzó su slogan y su lema: Dios, honor, patria y libertad, ¡ Viva el Sitio!.
Una familia entregada a la causa liberal, los Victoria de Lecea Federico, Eduardo, Manuel vivían en la calle Zabalbide y pertenecieron al Batallón de Auxiliares Voluntarios.
Yo le conocí entonces a don Canuto, yo era un chaval y entonces prestaba servicios como ordenanza o botones de una casa de Banca, bajo el Hotel de Antonia, que tenía el marqués de Bérriz.
Era don Canuto un mozo muy alto, muy decidido, lo que se dice un real mozo.
Estamos hablando en el año 1925, cuando el doctor don Vicente San Sebastián era el presidente de la sociedad, el contador Eduardo Palacios, el tesorero José Mazón, secretario Mariano Aróstegui, vicesecretario Cesáreo M. Taus, Isaac Vidaña era el bibliotecario.
CHOMIN BARULLO |
CHOMIN BARULLO
Cien años han pasado desde que un 20 de enero cerrara sus ojos a esta vida, aquél a quién llamaban cariñosamente "Chomin Barullo". No fue un tipo callejero cualquiera de esa galería pintoresca, que los clásicos de Bilbao recuerdan, fue un caballero cuya profesión fue la de corredor de comercio.
Estuvo metido en todos los barullos de los años 60-70 y 80 del siglo XIX, por eso el apodo.
Su verdadero nombre era Domingo Sagarminaga Zarraga, nació en Bilbao el 3 de mayo de 1830. En sus tiempos mozos fue sacristán de los Santos Juanes.
Sus padres Manuel Sagarminaga Belandia y su madre Vicenta Zárraga Jauría.
Fue sargento primera, de la segunda Compañía de Auxiliares, el capitán de la compañía se llamaba Antonio Zuazo y un sargento llamado Víctor Maruri.
Se casó con María Dolores Aguirre Rentería el 10 de febrero de 1858 en la iglesia de Santiago.
Sus hijos Elena, Perfecta, Enrique y otro hijo llamado Juan José que murió el 21 de septiembre de 1887.
De joven fue dependiente de confianza de un comercio de una acreditada casa de Bilbao, más tarde se hizo corredor de comercio y apoderado de Gerardo Mowinckel, hombre de negocios y en el año 1885 trabajaba como apoderado y hombre de confianza de Ignacio Alcalá Galiano.
Vivía con su familia a finales del siglo XIX en la calle Hernani tres, el solar era de Ignacio Alcalá Galiano.
Fue socio fundador de el Sitio y sargento de la segunda Compañía de Auxiliares, su capitán se llamaba Antonio Zuazo. Con Lorenzo Múgica famoso maestro de primera enseñanza de Bilbao en su batallón.
En esa compañía había algunos personajes, como don Bernabé Larrinaga el socio de Cosme Echevarrieta, Cesáreo Castiella el hijo del célebre oculista, los cabos Vicente Lemonauria, Aureliano Jaufret y Juan Cruz Úrcola, la compañía tenía dos cornetas.
En su Lexicón Bilbaíno, Emiliano de Arriaga, nos habla de Chomin Barullo, un hombre de grandes aptitudes e inteligencia superior, sumamente simpático y como tal relacionado con todo el mundo, de corazón noble y generoso.
Carácter bromista y bullanguero, de acendrado bilbainísmo.
Tenía conocimientos enciclopédicos, era el pie indispensable para toda fiesta popular que se precie, bailes, procesiones, conciertos.....
Además era un buen mozo, con un gran bigote que lo mismo servía para un fregado que para un barrido.
Fue tal el inolvidable Domingo Sagarminaga que se echa de menos su ausencia.
En su Lexicón Bilbaíno de don Emiliano Arriaga, comenta la figura de Txomín Barullo.
Era un hombre de grandes aptitudes e inteligencia superior, sumamente simpático y como tal relacionado con todo el mundo, de corazón noble y generoso.
De carácter bromista y bullanguero, indispensable para toda fiesta popular, ya fuesen corridas de toros, alguna procesión, baile o concierto.....
Era además un buen mozo con un poblado bigote y como organizador lo mismo servía para un fregado que para un barrido.
Así fue el inolvidable Domingo Sagarminaga a quien tanto se echa de menos en Bilbao.
Fue en su juventud dependiente de un conocido comercio de Bilbao, corredor de comercio el año 1871, apoderado del hombre de negocios Gerardo Mowinckel en 1874 y terminó como apoderado de don Ignacio Alcalá Galiano.
Era mayordomo de la cofradía de la Vera Cruz, era uno de los ocho fariseos que el Viernes Santo montaban guardia en el Santo Sepulcro.
En el solar propiedad de Ignacio Alcalá Galiano, se construyo una casa, en la calle Hernani tres y el vivía con su familia en el piso cuarto.
Pero cuando contaba cuarenta años, vivió el con su familia e hijos, en el número uno de la calle de el Perro.
Hablaba euskera y se crio en un ambiente euskaldun, famoso aurreskulari que exhibía su talento por todas las romerías del país.
Tuvo por íntimos amigo a Pancho Bringas y al eximio Julián Gayarre.
Desde el lunes y con la función del Quinario en San Antón, empezaba la Semana Santa, luego estaban las Lamentaciones en Santiago del Miércoles de Nicolás Ledesma, los chicos armados de martillos y carracas a romper la cabeza a Judas.
Las procesiones se organizaban bajo la dirección de Chomin Barullo, se armaba el escuadrón de fariseos, se arreglaban los vistosos trajes de los soldados romanos.
Dirigía la procesión con su bastón de mando, dando órdenes, alineando las hachas, haciendo parar o andar, todo jadeante y sudoroso, los miradores y balcones llenos de chicas guapas viendo la procesión, por último venía la feria del tocino los sábados, en el Arenal donde se podía comprar jamones, chorizo, morcillas y longanizas.
Vestido de levita y provisto de un bastón con una gran bola y borlas doradas, corriendo incansablemente de un lugar a otro, siempre salía airoso de aquellos barullos, por eso le dieron ese apodo.
Hombre de ocurrencias en 1865 se le ocurrió pedir permiso al consistorio para montar una gran carpa en el Arenal para organizar bailes, para la sociedad musical El Recreo.
Chomin Barullo alto y fornido, en mangas de camisa se le podía ver , en los burladeros y pasillos de la plaza de toros, dando órdenes a los monosabios, picadores o banderilleros.
Fue el antecesor de Mario Ugarte, similar figura pero este perteneció al siglo del que doy cuenta en una entrada de mi blog.
Murió el 20 de enero de 1890 a los sesenta años, una gripe se lo llevó y parodiando a Mario Ugarte podemos decir ¿Qué pocos quedamos?, efectivamente muy pocos. Al acontecerle el fatal desenlace estaba viudo y tenía varios hijos. El entierro fue el martes día 21 de ese mes a las 9 de la mañana en Mallona y los funerales el viernes 24 en San Vicente Mártir de Abando.
Acudió mucha gente, le colocaron tres coronas una de la familia, otra de sus correligionarios y la tercera de los amigos de la Sociedad el Sitio, de la que fue fundador.
CESAREO CASTIELLA CUADRADO
Había nacido de un pueblo del Pirineo de Huesca, llamado Sarvisé el mayorazgo familiar le hizo abandonar el pueblo para abrirse camino
en Bilbao. Se casó con Andresa Taramona Sainz, una antigua familia de origen Encartado, emparentados con los Hurtado de Saracho y familia de fortuna.
Se casaron en la iglesia de Santiago el 4 de junio de 1873 y vivió el matrimonio en la calle Belosticalle once.
Cesáreo en el censo electoral de 1895 vivía en la calle Ronda, 26 segundo piso, era comerciante y tenía 54 años.
Su hermano Jorge vivía en el treinta y dos de la calle Ronda, también comerciante y tenía 50 años.
Tenían un negocio textil en los bajos de la citada calle, él y su hermano Jorge que entre los años 1890 y 1894 fue concejal del ayuntamiento de Bilbao.
Fue Auxiliar de la segunda compañía, con Chomin Barullo y Bernabé Larrínaga en la misma compañía y su capitán fue Antonio Zuazo.
Un Manuel Taramona sirvió en la sexta compañía de Auxiliares, hermano de su mujer. Fue socio de el Sitio con el número 98.
El hijo de Cesáreo y Andresa fue un destacado oftalmólogo en Bilbao, se llamaba Cesáreo Castiella Taramona nacido en Bilbao 30 de marzo de 1874 y fallecido 9 de febrero de 1949, se casó con María Maíz Nordhausen.
Don Federico Echevarria Rotaeche, Fotografía del Archivo de la Diputación Foral de Bizkaia. |
JUAN RECACOECHEA
Era capitán de la primera compañía de los auxiliares, el alférez de la misma se llamaba Federico Echevarría y otro personaje singular en el Bilbao de aquella época, don Salustiano de Orive el farmacéutico y su suegro era el brigadier Isidoro Ontiveros del ejército carlista. El suegro carlista y él liberal.
FEDERICO ECHEVARRÍA ROTAECHE
A los noventa y un años dejó de existir en nuestra villa don Federico Echevarría y Rotaeche, uno de los hombres más destacados en el vasto campo de las actividades de toda Bizkaia.
Durante más de medio siglo, este capitán de empresa e infatigable organizador y productor.
En su juventud fue Federico Echevarría un enamorado de las ideas liberales, llegando a obtener el grado de teniente de la tercera compañía del batallón de Auxiliares, distinguiéndose en el asedio que los carlistas pusieron a Bilbao, donde luchó con denuedo contra las hordas fanáticas del pretendiente.
Terminada la guerra se consagró de lleno al montaje de las industrias que más tarde habían de situarle a la vanguardia de los productores nacionales.
En 1878 montó unos talleres para la impresión de la hojalata con destino a las conservas y más acometió la fabricación de calderería y objetos de chapa galvanizada. Al principio fue un modesto taller en las afueras de Bilbao, un modesto taller el fabricaba clavos para herrar.
Posteriormente montó una fábrica de clavetería, con un horno convertidor y un tren de laminar que fue el primero que se instaló en España y un taller mecánico de construcción y reparación de maquinaria.
En Sestao bajo la denominación de S.A. Iberia donde instaló la fábrica de hojalata.
Esta entidad se fusionó luego con la Compañía Metalúrgica Vizcaya, de la que fue uno de los promotores y en 1902 se agrupó con la Sociedad Altos Hornos y Fábricas de Hierro y Acero de Bilbao, constituyendo la gran factoría Altos Hornos de Vizcaya.
En 1901 compró la fábrica de alambre de Castrejana y la de tachuelas Santa Águeda.
Fue concejal del Ayuntamiento de Bilbao, diputado y senador.
Tomó parte en la constitución del Banco de Burgos.
Empresas mineras y siderúrgicas.
Era actualmente jefe superior honorario de la Administración civil, presidente de la Sociedad Económica de Amigos del País y de la Liga Vizcaína.
Decía Joaquín Adán de Federico: Noventa y un años, su entusiasmo juvenil. Su gorra de auxiliar, la cresta roja como él la llamaba con efusión bravía, que la conserva como un airón sentimental y romántico, con esos años, una salud espléndida, apetito en pie de guerra, optimismo , fortaleza.
Federico fue bautizado en la iglesia San Nicolás de Bari el 1 de agosto de 1840 y se casó con Felipa Zuricalday Eguidazu el 13 de septiembre de 1869, en la iglesia de Santiago.
Federico Echevarría falleció el 30 de enero de 1932 y su mujer el 15 de abril de 1902.
Manuel Villar fue auxiliar de la sexta compañía, que la mandaba el capitan Guillermo Celayaran, alférez Severino Achúcarro, sargento primero Miguel Vitoria.
Voluntarios en esa compañía fueron: Aniceto Achúcarro, Bernardino y Antolín Ercilla, Sabino Goicoechea, Manuel Taramona..........
Manuel Villar compuso el Himno de los Auxiliares
Somos Auxiliares
sin color ni grito
De este pueblo invicto.
Somos Liberales.
Y derramaremos,
toda nuestra sangre.
Por la libertad.
Ya nos llaman a las armas.
Compañeros acudid.
Y corramos sin demora.
Nuestro deber a cumplir.
¡A vencer!
¡O morir!
El himno tenía tres estrofas, coro y solo de tenor, al himno le seguía una polka- mazurka en "La Aspillera" y la jota que se cantaba en el Sitio.
Manuel Villar Jiménez, nació en Tudela el 3 de mayo de 1849, se casaron en San Nicolás de Bari de Bilbao el 9 de noviembre de 1874,
su mujer se llamaba Dolores Narbaiza Ercilla.
Como solo de la música no se podía vivir, era profesor de música en las escuelas municipales de Bilbao. Además de profesor fue también cantor.
Tuvo que solicitar una mensualidad reglamentaria de supervivencia, que así estaba establecido por el consistorio bilbaíno.
En sus últimos años dio clases de música en las Escuelas Municipales de Berastegui, en los Jardines de Albia.
Su hijo Manuel Villar Narbaiza siguió sus pasos y también fue profesor de música, tenía dos hermanas más jóvenes y él.
En el año 1893 se le declara enajenado mental y es recluido en un manicomio, lo certifican dos médicos en noviembre de ese año, los doctores Carmelo Gil Gorroño y Domingo Pascual.
Manuel Villar murió el 28 de octubre de 1902.
A LA MEMORIO DE RAMÓN TALASAC, INSIGNE INVESTIGADOR DE LA SOCIEDAD EL SITIO DE BILBAO, SOCIO DE ELLA COMO LO FUE TAMBIÉN SU PADRE.
FIN
*El Sitio de las libertades, José Manuel Azcona, El Correo.
Memorias de un Bilbaíno de José Orueta.
Doctor Juan Gondra Rezola.
Euskariana.
Hemeroteca de el Correo.
Archivo Diputación Foral de Bizkaia.
Biblioteca Nacional de Madrid.
* 2 de mayo de 1902 El Nervión, Ignacio de Echevarría.
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