 |
EL REY ENRIQUE III EN VALLADOLID EL 3 DE NOVIEMBRE DE 1404, CONFIRMA POR UN ALBALÁ SUYO YA EN EL AÑO 1394, QUE HACE DONACIÓN A MARTÍN SÁNCHEZ DE LEGUIZAMÓN EL SOLAR QUE HABÍA OCUPADO EL ALCAZAR DE BILBAO. ESTE ES EL DOCUMENTO QUE SE CONSERVA. Archivo Diputación Foral de Bizkaia. EN LOS LEGUIZAMÓN HABÍA TRES RAMAS, LA RAMA DE LOS PREBOSTES, LAS RAMAS LEGÍTIMAS SECUNDARIAS Y LA RAMA DE BEGOÑA DE DONDE SALE MARTÍN SÁNCHEZ DE LEGUIZAMÓN. POR ESO LOS LEGUIZAMÓN TENÍAN UN PASO PARTICULAR PARA LLEGAR DIRECTAMENTE A LA IGLESIA, SIN SALIR A LA CALLE Y ES MUY FACTIBLE QUE ESE TERRENO LA FAMILIA LO DONÓ AL MUNICIPIO PARA CONTRUIR LA IGLESIA DE SAN ANTONIO ABAD, PORQUE ADEMÁS POSEÍAN UNA CAPILLA PARTICULAR EN LA IGLESIA.
|
LOS LEGUIZAMÓN, LA RAMA DE BEGOÑA:
Juan de la Guerra Leguizamón, casado con Elvira Sánchez de Zamudio, hijos Martín Sánchez de Leguizamón, Juan Nuñez "Mayor" de Lara, Señor de Vizcaya casado con Juana la Coja, Juan de la Guerra Leguizamón + 1397, Pero Núñez de Lara Conde de Mayorga, Luis de Leguizamón, Teresa Luis de Leguizamón casada con Gonzalo Gómez de Butrón + 1416, Gonzalo Gómez de Butrón y Leguizamón + 1498.
En el año 1332, recién fundada la villa de Bilbao fue visitada por Alfonso XI, el cual dispuso que se edificase un alcázar, a la entrada del puente viejo, en el lugar que hoy ocupa la Iglesia de San Antón, fue construida sobre la planta del alcázar que fue destruido un siglo después (1332-1432).
Fue en testimonio de agradecimiento por haber sido muy bien acogido en Bilbao Alfonso XI, cuando hacia el año 1334 invadió el Señorío por hallarse enemistado con el señor Juan Núñez de Lara que estaba casado con María Díaz de Haro.
Se comenzó a elevar el alcázar en el peñascal que dominaba la entrada del puente, no terminada la obra por haber hecho las paces con don Juan Núñez de Lara.
El mismo monarca estando en Bermeo, otorgó una carta para que el concejo de la villa de Bilbao pudiera gastar 1.500 maravedís durante cinco años, es decir un total de 7.500 maravedís, para construir los muros de defensa que empalmaron con dicha fortaleza o alcázar, levantado a la entrada de la villa, al lado del puente.
El primer lienzo de la muralla de Bilbao se trazó desde el alcázar y siguió hasta la torre de Leguizamón a la entrada de Somera, siguiendo por esta calle hasta el Portal de Zamudio, luego por la curvatura de Cinturería, calle de la Torre (con las torres de San Miguel y Zurbaran, rodeando el templo de Santiago, hasta el portal de Santa María (torre llamada de Bilbao), alcanzando la Ribera, por las torres de Arteaga y Arbolancha, enlazando con los muros de las torres cabeceras de las Siete Calles, las de Marquina, otras dos de Arbolancha y la de Zubialdea (junto al puente).
Tras el incendio de 1571 la muralla fue derribada y las viviendas que bordeaban las Siete Calles fueron integradas al núcleo urbano.
El circuito amurallado eran lienzos de piedra de sillería, el camino de Ronda circunvaló la parte externa.
LA IGLESIA DE SAN ANTÓN:
La iglesia se cobijó bajo la advocación de San Antonio Abad.
Derruido el alcázar en el año 1366 se rebajó el peñascal que era calcáreo y se empezó a construir la Iglesia de San Antón, donde se cantó misa por primera vez en esa iglesia el 5 de agosto de 1433.
 |
EN ESTA FOTO SE PUEDE VER POR DONDE ESTABA EL PASO DEL PUENTE, POR LA IGLESIA DE SAN ANTÓN, AL AYUNTAMIENTO PEGADO A LA IGLESIA Y LA PLAZA VIEJA Y EL MERCADO A LA ORILLA DE LA RÍA, FOTO HACIA 1874.
|
Pertenece el edificio a la arquitectura gótica ultimo periodo y hay algún reflejo del gusto del renacimiento, en las capillas y de el mismo estilo en la elegante y graciosa decoración de la puerta de ingreso, lamentablemente se han destruido no pocas de sus líneas y detalles.La disposición interior se ha conservado, no así el exterior que se a ido modificando en las épocas posteriores.
Lo acusan su torre de campanas churriguerescas y el pórtico del renacimiento, con su portada de transición, con estatuas de madera de San Pedro y San Pablo atribuidas al maestro Anchieta, pintadas de color piedra por el pintor Timoteo Chávarri en 1892, antes eran policromadas y doradas.
Hay una tabla curva del Divino Pastor de Luis Peret que ahora se expone en el Museo de Pintura de Bilbao. También un cuadro de Santiago y otro de la Virgen con el niño ambos de Luis Peret, estos son propiedad del Ayuntamiento de Bilbao.
A lo largo de los años San Antón ha tenido cuatro retablos, el altar mayor, uno en 1432, otro en 1597 que fue dibujado por Martín Zubieta y Esteban Velasco lo confeccionó.
Las capillas, la de San Roque, la de la Piedad y la de Santa Lucia.
La imagen de la Piedad se atribuye al imaginero flamenco Guiot Beaugrant. En Bilbao había tres imágenes, en San Antón la Piedad, la de Santiago de Aboitiz y la de San Nicolás de Bari, de Juan Pascual de Mena.
Junto al altar mayor, en el arco principal está el escudo de los Leguizamón y la capilla de Nuestra Señora de los Dolores, con su verja y escudo pertenece a los Recalde. Antes se llamó de la Vera-Cruz, la fundaron el 21 de julio de 1554 Juan Martínez de Recalde, veedor de la Armada Real y María Sáez de Basozabal, abuelos del ilustre marino-almirante del mismo nombre.
El almirante del rey se llamado Juan Martínez de Zurbaran Recalde dueño de la torre de Zurbaran.
En la sacristía hay dos imágenes de gran mérito, las de San Antón y San Sebastián, otra imagen de San Antón esta en el Museo Vasco Arqueológico y Etnográfico.
En la parte de la epístola, hay una capilla dedicada a San Pedro y San Pablo, que ahora lleva el nombre de la Virgen de Begoña pintada por Manuel Losada.
En los muros de la iglesia cuelgan tres lienzos, La Asunción, La Aparición de la Virgen a San Bernardo y la Visita de San Antonio Abad a San Pablo Ermitaño, atribuidos a Peret.
También desaparecieron dos estatuas de las hornacinas, sustituidas en 1892 dos figuras de San Pedro y San Pablo que se hayan en el retablo de el altar mayor que fue sustituido por el actual.
El arco rebajado de la escalera del coro es muy valiente así como las cuatro columnas del centro de la iglesia.
Esta ocupa una hermosa posición en situación elevada para impedir en lo posible que las inundaciones causaran daños en ella.
Las reformas en esta iglesia hasta la fecha de 1895 no han sido muy importantes.
En el año 1873 fue cerrada la iglesia para ser destinada a depósito de víveres durante el sitio de Bilbao. El celoso cura párroco señor Castañares entrego las llaves al alcalde.
Durante esta época hubo un incendio en la capilla de Santa Ana que se halla junto a la sacristía y se quemó el retablo de ella, el monumento allí depositado que tenía grandes bastidores.
Durante el Sitio cayeron ocho bombas a la iglesia destrozando las bóvedas, las obras de restauración corrieron a cargo del ayuntamiento y se quitaron cuatro retablos, se abrió al culto el 26 de diciembre de 1876, con una solemne procesión desde la iglesia de Santiago, donde estuvo provisionalmente la parroquia.
También quedó destruido el órgano y fue sustituido por otro que costó 80.000 reales, reunidos en suscripción pública, promovida por el cura párroco señor Castañares.
El 13 de octubre de 1881, fue denunciada la iglesia porque amenazaba ruina, uno de los arcos del tejado del lado del evangelio, no podía sostener tanta mole de piedra.
Se cerró el templo bajo la dirección de las obras, del arquitecto Sabino Goicoechea, se ejecutaron obras de reparación, se quitaron sillares de piedra y se rasgaron ventanas ojivales, reminiscencias del siglo XIV, en los que pusieron cristales pintados y que ahora van a ser sustituidos. Se abrió la iglesia el 12 de octubre de 1882, las obras ascendieron a 180.000 reales, se pagó con una suscrición popular.
En el año 1892 fue sustituido el retablo que perteneció primero al convento de San Francisco, por otro muy artístico, de estilo gótico florido del siglo XV, obra de los señores Garamendi, Larrea y Basterra.
En esta iglesia fueron bautizados los Ybarra, Epalza, Antonio Fernández del Campo......
El primer bautizado en esa iglesia fue Domingo Miriategui el 25 de enero de 1580 y el primer casamiento Pedro Ybarra y Francisca Urnieta el 25 de febrero de 1581 y la primera defunción la de Catalina Igureta el 13 de octubre de 1666.
En la iglesia hay algunas obras de arte muy notables: Una aparición de la Virgen a San Antonio.
En la parte exterior la que da la ría había un balconcillo de piedra, del que se ven todavía los pies, donde los presbíteros estaban dedicados a la pesca en sus ratos de asueto.
Un aciago día se dejaron el balconcillo abierto y unos rateros entraron a la iglesia, se llevaron las alhajas de la iglesia y algunos cálices, no teniendo tiempo para esconderlas las arrojaron a la ría y unos chiquillos que acostumbraban a bañarse en la ría las descubrieron.
El balconcillo fue demolido y los curas no pudieron pescar más.
LA TORRE DE SAN ANTÓN
Según el diseño del maestro Gabriel Capelastegui, se comenzó a reformar y ampliar la torre el año 1774, se gastaron 60.000 reales.
Se hizo con los materiales sobrantes de la demolición de la torre vieja.
El 7 de diciembre de 1775 se colocó la giralda construida en cobre construida por un maestro calderero de la calle Ascao, según el croquis del escultor Jerónimo de Argos.
Mide ocho pies de altura, esta giralda que antes dominaba el mercado de la plaza vieja de Bilbao.
La torre anterior a a la de 1775, la hizo en 1650 el arquitecto Juan de Urizar y Zabala y por remate la giralda labrada por Juan de Palacios, escultor nacido en Limpias.
Interiormente la planta es de tres naves, algo irregular, conservando la pureza del gótico del último periodo. Tiene un precioso triforio, sobre el que se abren los ventanales del templo que quedan enlazando con la buena nervadura de las bóvedas.
A parte de otras ventanas y trabajos esmerados en la fábrica.
Llama la atención la bella barandilla del coro.
Cuatro retablos ha tenido el altar mayor de San Antón, uno del año 1432, otro colocado en 1597 cuya traza dibujó el bilbaíno Martín de Zubieta y que la confeccionó Esteban Velasco, nacido en Vitoria, la imaginería de los escultores Juan de Uribarri vecino de Orduña y Martín Basabe vecino de Aulestia.
El tercero fue trasladado fue trasladado a San Antón desde el convento de San Francisco, último el actual no tiene ningún merito.
De las tres capillas de esta iglesia que quedan, en la puerta de entrada la primera es de San Roque con un altar moderno, la segunda la de la Piedad y la de Santa Lucia que es la tercera.
EL Marqués de Vargas escribió en el año 1914 en la Revista Historia y Genealogía Española, a la vista de los archivos de Leguizamón, que las armas de esta estirpe aparecían en un arco principal, junto al altar mayor de la Iglesia de San Antón, a la parte del Evangelio, en la Capilla de los Leguizamón, en el altar de Santa Catalina, en el sepulcro de dicha capilla y en otra tumba en el presbiterio
Junta a esta se halla la de Nuestra Señora de los Dolores que a los lados del altar, en los extremos y en alto donde se inicia la bóveda tiene dos escudos iguales de piedra cuartelados.
Lo mismo que la capilla de los Leguizamón, esta capilla pertenecía a los Mártires de Recalde, tiene en la parte superior su bonita verja con un escudo de colores cuartelado.
Esta capilla, también llamada de la Vera Cruz se fundó el 21 de julio de 1554 por Juan Martínez de Recalde, veedor de la Armada (inspector, visitador de la armada), su mujer María Sáez de Basozabal, abuelos del almirante Juan Martínez de Recalde Larrinaga, nacido en Bilbao el año 1540 y fallecido en La Coruña
el 23 de octubre de 1588. Este almirante era conocido por el apodo "El Matador" y "El Hunde-Barcos", pertenecía a la Orden de Santiago.
La imagen de La Piedad estaba en el altar plateresco de Nuestra Señora de los Dolores del linaje de los Recalde, ha sido atribuida al imaginero flamenco Guiot de Beaugrant. Es muy bella aunque no inspira gran devoción por lo peculiar de las expresiones.
En la sacristía hay un San Antón y otro de San Sebastián, de gran mérito artístico que quizás puedan ser de Mena.
En la epístola hay una capilla dedicada a San Pedro y San Pablo y ahora a la Virgen de Begoña, decorada por el pintor bilbaíno Manuel Losada, con escenas de las vidas de San Ignacio de Loyola y Beato Valentín de Berri-Ochoa.
Su altar era de piedra ricamente decorado al estilo Renacimiento y frente a él un escudo de madera antes policromado que ostenta las armas de los Ocariz y que por donación del Marqués de Vargas se halla en el Museo Arqueológico y Etnográfico de Bizkaia.
En esta capilla de los Santos Pedro y Pablo, antiguamente estuvo Juan Pérez de Ibieta, que murió en 1522.
En los muros de la iglesia hay tres lienzos que representan la Asunción, la Aparición de la Virgen a San Bernardo y la visita de San Antonio Abad a San Pablo Ermitaño, atribuidas a Paret.
La imagen de Santiago y otro de la Virgen con el Niño, ambos son de Paret propiedad del Ayuntamiento de Bilbao.
Hay otro cuadro de Paret la Invención de la Santa Cruz por Santa Elena.
 |
PRIVILEGIO REAL DADO POR EL REY ENRIQUE III, A LA VILLA DE BILBAO. EN MADRID 15 DE DICIEMBRE DE 1393, CONFIRMANDO OTROS OTORGADOS POR EL REY JUAN I EN LOS AÑOS 1379 Y 1372, QUE AMPLÍAN LOS PRIVILEGIOS, FRANQUEZAS Y LIBERTADES CONCEDIDAS POR LOS REYES SEÑORES DE VIZCAYA. Archivo de la Diputación Foral de Bizkaia. |
EL PUENTE DE SAN ANTÓN
Cuando se fundó la villa ya existía un puente que comunicaba las dos orillas que era de madera y fue arrastrado por las grandes avenidas.
Lo sustituyeron por otro de piedra para ser destruido en 1380.
La avenida de agua del 29 de abril de 1490 se llevó la mitad del puente de piedra. Otra, la del 27 de junio de 1440 lo arrastro casi por completo y lo mismo en 1450 que desmoronó el arco menor, sufriendo iguales percances el 15 de septiembre de 1550 y el 22 de septiembre de 1593.
En el año 1335 se concede a Doña María Díaz de Haro, mujer de Juan Núñez de Lara, Señor de Vizcaya a petición de la villa de Bilbao, que se pueda cobrar pontaje o peaje a las acémilas que pasen cargadas por el puente principal de la villa para que su importe se destine a obras de reparación del mismo, se concede dicho privilegio en Lerma el 24 de febrero de 1335.
Fue el único puente en Bilbao durante siglos, con tres arcos desiguales, uno de ellos pequeño, el mayor tenía 110 pies y 50 de altura.
Bajo el puente de San Antón se "empozaba" a los delincuentes de la villa, algunas de estas ejecuciones presenció el rey Enrique IV en 1457. El método del empozamiento consistía en atar una gran piedra al cuello de la víctima y sumergirle en el agua, sujetos sus pies y sus manos hasta morir.
Ese puente lo mismo que el actual unía ambas márgenes de la ría, desde la margen derecha se traslada a la izquierda, la originaria puebla ferrona y marinera y el paso obligado de los romeros que marchaban al camino de Santiago.
Recuerda esto una tosca imagen de Santiago a caballo que hay en una hornacina en Urazurrutia. Es muy posible que en este lugar se levantase una ermita jacobea.
Que el actual puente fue construido el año 1936 y vino a sustituir el primitivo puente inaugurado en el año 1877.
 |
MAPA DE BILBAO DE 1442, DIBUJO DE JUAN EUSTAQUIO DELMAS. DE LA PRIMITIVA VILLA DE LAS TRES CALLES, SOMERA, ARTECALLE Y TENDERÍA, SE FUE PASANDO A LAS SIETE CALLES, RODEADAS POR LA MURALLA QUE LAS ABRAZABA, ENLAZANDO CON LAS TORRES, DE LOS LEGUIZAMÓN, GÜEMES, ARBOLANCHA, MARQUINA, ARBIETO, AZURDUY, NOVIA Y LARRINAGA, CON LOS PORTALES DE ZAMUDIO, ARENA, SAN MIGUEL, NUESTRA SEÑORA DEL SOCORRO, ZUBIAUR E IBENI. EN EL AÑO 1483 LOS REYES CATÓLICOS AUTORIZARON LAS RUPTURA DEL RECINTO AMURALLADO PARA EL PRIMER ENSANCHE HACIA EL ARENAL, POR EL CAMINO NUEVO O BIDEBARRIETA. LA PLAZA VIEJA CON EL AYUNTAMIENTO QUEDARON FUERA DE LAS MURALLAS, SOBRE LA RIBERA DE LA RÍA, EN UNO DE ESTOS LADOS DE ESA PLAZA SE CELEBRABAN LOS DÍAS DE MERCADO, CORRIDAS DE TOROS Y LAS FIESTAS PATRONALES DE LA VILLA, EL CORPUS CHRISTI Y SU OCTAVA. SE PUEDE VER EL CAMINO ZAMUDIANO Y EL ARRABAL DE SAN NICOLÁS. QUE FUE BARRIO DE PESCADORES CON SU PRIMITIVA ERMITA BAJO LA ADVOCACIÓN DE SAN NICOLAS. A LA PARTE DE ARRIBA DEL PLANO EL ARRABAL DE IBENI. |
HUNDIMIENTO DEL PUENTE DE SAN ANTÓN
El tres de agosto de 1882 se hundió el viejo puente de San Antón, lo estaban derribando un grupo de obreros fue a las diez y media de la mañana, a su lado ya estaba construido otro de mejores y porte.
Siendo alcalde de Bilbao Eduardo Victoria de Lecea.
Al caerse uno de los arcos del viejo puente, murieron cinco personas, dos más al ingresar en el hospital civil y se trasladaron otros doce heridos graves.
La sociedad bilbaína quedó consternada y se abrió una subscripción pública para ayudar a las familias, era el puente más antiguo de Bilbao.
Esta parte era de menor profundidad durante la bajamar, este puente unía las dos partes Abando (Allende del Puente) y la parte de Begoña en la margen derecha.
Era un puente de perfil gótico, reformado y reconstruido después de muchos aguaduchos, destruyéndose algunos de sus arcos.
El paso de este puente, era estrecho, para caballerías, arrieros y pequeños carromatos, por la noche se cerraba con cadenas y se cobraba peaje.
Pero al llegar los nuevos tiempos, se decidió la construcción de otro nuevo puente.
Las obras se empezaron en 1872 y duraron hasta 1877, el día 25 de Navidad de 1877 fue inaugurado.
Los planos y trazados corrieron a cargo Pablo Alzola y Ernesto Hoffmeyer en 1877, entonces Bilbao tenía dos puentes junto a la iglesia de San Antón.
Para el ayuntamiento no tenía razón de ser, mantener dos puentes en el mismo paraje.
Entonces surgió una voz que con una sensibilidad pidió que no se destruyera, por tratarse de un monumento que llegó a configurar el escudo de Bilbao.
El consistorio a lo más que accedió fue a una reproducción del puente en madera de tilo como recuerdo, el concurso lo ganó Fernando Galina, en julio de 1882 todavía no lo había entregado.
Pedro Artajo se ofreció a derribar el viejo puente y la reparación de los muelles contiguos, la obra la llevó a Hoffmeyer.
Al desaparecer la rampa de la orilla derecha, el puente ganó en extensión la Plaza Vieja, como hubo muchos escombros del puente se llevaron a la de Uribitarte para el relleno los años 1880- 81-82
 |
DIBUJO DE LA TORRE DE ZAUBIALDEA, ERA UNA DE LAS TORRES QUE EN LA EDAD MEDIA GUARNECÍAN BILBAO, LAS SIETE CALLES. A LA DERECHA SE PUEDE VER UNA PARTE DE LA CASA DE LOS LEGUIZAMÓN. EN ELLA SE DIERON TODOS LOS PARABIENES A LOS SEÑORES DE VIZCAYA, SIEMPRE QUE VENÍAN A BILBAO, EL REY PEDRO EL CRUELSE HOSPEDÓ EL 13 DE JUNIO DE 1359, ENRIQUE IV EL 1 DE MARZO DE 1457. FERNANDO EL CATÓLICO EL 15 DE JUNIO DE 1476. MARTÍN IBAÑEZ DE BILBAO DUEÑO DE LA TORRE, CASÓ TERESA MARTÍNEZ DE BARRONDO, ERAN LOS PROPIETARIOS EN EL AÑO 1464 ERAN UNOS DE LOS MAYORES CONTRIBUYENTES A LAS ARCAS MUNICIPALES DEL AYUNTAMIENTO. EN EL AÑO 1595 ERA PROPIEDAD DE LOS ARBIETO, POR EL MATRIMONIO DE MARÍA SÁEZ DE BILBAO CON UN ARBIETO. EN EL AÑO 1643 PASÓ LA TORRE A LOS ECHEBARRÍA Y EN EL AÑO 1655 EL DOCTOR JUAN PEDRO ECHEBARRÍA REEDIFICÓ DESDE LOS CIMIENTOS HASTA LAS ALMENAS DE LA TORRE. |
Los escudos de armas se empezaron a generalizar en Bizkaia entre los siglos XIV al XV y lo mismo puede decirse de la adopción por parte de los municipios.
Escudo de la villa de Bilbao tenía su propio escudo, medio siglo después se tomó el de la casa torre de Zubialdea, añadiendo el de la Casa de Haro, con lo que el escudo vino a ser, un puente, una torre y dos lobos.
El puente y la torre eran los de la Casa Zubialdea, era la única casa solariega de importancia que existía en Bilbao, al momento de expedir la carta de fundación de Bilbao, Don Diego López de Haro.
En dicha torre falleció Lope Díaz, padre de don Diego López de Haro falleció en esa torre tras 18 meses de asedio impuesto por los vizcaínos por no haber cumplido su promesa que hicieron él y su mujer, de restituirles sus libertades, buenos usos y fueros de los que les habían despojado.
Los señores de esa torre, adoptaron el apellido de Bilbao la Vieja, para dar a entender que procedían del Bilbao Antiguo e infanzón.
La torre de Zubialdea fue destruida en el año 1865, ya en 1868 después de la Revolución, se pidió la demolición del puente.
Si el puente se derriba, será un arrasamiento de la historia de la villa y un verdadero patrón de ignominia para los bilbaínos de la generación actual y sobre todo de los capitulares que lo decretaron o la consintieron.
El puente tiene una existencia de cinco siglos y ha sido el asombro, el amor y el orgullo de insignes capitulares y cónsules que dictaron leyes municipales, mercantiles hasta al nuevo mundo.
La vida de ese puente ha sido larga, la villa ha podido servirse de él y tiene una consagración histórica y heráldica, municipal en el escudo de la villa y si se hace pedazos puede ser como un pueblo bastardo y confeso de traición en el momento que desaparezca.
Es un puente que tiene el atrevimiento de su traza y su relativo merito arquitectónico.
Las razones que se dicen para destruir el puente, que es ya innecesario desde que se ha construido el otro, más cómodo y la segunda razón que embaraza el tránsito y el desahogo público.
El verdadero motivo para conservar el puente es su valor histórico, arqueológico y artístico.
El verdadero monumento histórico, arqueológico, tradicional y artístico son los dos altos, sólidos y gallardos arcos del puente y es una maravilla de cuanto en Bilbao se ha escrito.
Es un recuerdo histórico y testimonio de amor y veneración de las obras y memoria de los antepasados.
¿A quien perjudica esa conservación?.
Y creo ya haber cumplido con mi deber escribiendo esto, porque así me libro, de que el camino de la vergüenza entorpezca mis huesos, si alguien se acuerde de mi un día en que el Bilbao de mi tiempo se acusado de haber ultrajado, lo que respetan todos los pueblos honrados y cultos.
 |
DESDE BILBAO LA VIEJA SE PUEDE VER EL MERCADO, EL AYUNTAMIENTO, LA PLAZA VIEJA, SAN ANTÓNY EL PUENTE DE SAN ANTÓN, Y LAS CASAS DE LA RIBERA CON SUS ARCOS. Foto del Archivo Diputación Foral de Bizkaia. |
ANTONIO TRUEBA Y DE LA QUINTANA, SE OPONE AL DERRIBO DEL PUENTE VIEJO DE SAN ANTÓN:
Cuando hacia 1865 se demolió la Torre de Zubialdea, que estaba en la Plaza Vieja esquina a la derecha con la calle Artecalle, protesté enérgicamente aunque reconociendo mi falta de autoridad para ello.
Contra la destrucción de aquel monumento histórico, que no dudo en calificar de insigne.
La Diputación de Vizcaya y el Ayuntamiento de Bilbao, la Comisión de Monumentos que por entonces no daba señal alguna de vida y hasta la Academia de las Nobles Artes de San Fernando, en nombre de su secretario Eugenio de la Cámara simpatizaron con mi protesta y se dolieron de no poder prestar ayuda para conservar ese monumento, pero hubo alguien que a esa propuesta contestó con denuestos.
Desde que se acordó demoler el puente de San Antón, empleé la fórmula análoga y he vuelto a recibir parecidos denuestos, pero yo no soy hombre que abandona el camino por denuestos cuanto tengo fe en lo que es lo más recto que puedo seguir.
Algunos vecinos de Bilbao la Vieja han pedido al ayuntamiento que apresure el derribo del puente de San Antón, fundándose en su feo aspecto.
Como individuo inerte de la Comisión de Monumentos, corresponde a la Academia de la Historia y como Cronista del Señorío de Vizcaya, como vecino de Bilbao y sobre todo como hombre que tiene constantemente la pluma en la mano para dirigirse al público, me creo en el deber de decir que los que piden que desaparezca por completo el puente de San Antón, debían de pedir justamente lo contrario, que se conserve por su hermosura y no por la fealdad de su fisonomía que los siglos prestan a los monumentos arquitectónicos.
Tres monumentos tenía Bilbao que merecían conservarse a toda costa por sus condiciones históricas, la torre de Zubialdea, fue única casa solariega e infanzona anterior a la fundación de la villa de Bilbao.
La villa tomó de ella el escudo de armas, la torre fue morada con estandarte de los Señores de Vizcaya y también los Reyes de Castilla la visitaron, cuando unos y otros venían a Bilbao.
Otro monumento singular la Iglesia de Santiago, erigida con anterioridad a la fundación de Bilbao en 1300.
Aunque se conserva su fábrica primitiva el primer cuerpo de su torre o campanario.
El puente de San Antón que fue anterior a la fundación de la villa, aunque su material y forma se ha ido renovando a través de los años, además de los estragos causados por las avenidas.
Antonio Trueba y Juan Eustaquio Delmas fueron los intelectuales que se opusieron a su derribo.
 |
FOTO DE LA CALLE LA RIBERA, EL AYUNTAMIENTO, LA IGLESIA DE SAN ANTÓN, TAMBIÉN SE PUEDE VER LOS TENDERETES DEL MERCADO. Foto del Archivo de la Diputación Foral de Bizkaia, hacia el año 1870. |
FIN
LOS LINAJES DE BIZKAIA EN LA BAJA EDAD MEDIA, PODER, PARENTESCO Y CONFLICTO DE ARSENIO DACOSTA.
EL ESPACIO PÚBLICO DE LA VILLA DE BILBAO, SERGIO ARIZAGA BOLUMBURU Y BEATRIZ MARTÍNEZ MARTÍNEZ.
ALEGATO Y DEFENSA DE LA TORRE DE ZUBIALDEA Y DEL PUENTE DE SAN ANTÓN, el Noticiero Bilbaíno el 20 de junio de 1880.
ARCHIVO DIPUTACIÓN FORAL DE BIZKAIA.
HEMEROTECA DE EL CORREO.
LA IGLESIA DE SAN ANTÓN, IGNACIO DE ECHEVERRÍA, AÑO 1895.