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| foto de Bilbao,pintada sobre madera posiblemente de la Casa Lux(Torcida) de la Librería Anticuario Astarloa |
CUANDO ALGUIEN CAÍA A LA RÍA:
Lo escribió Julián Echevarría"Camarón" el 3 de mayo de 1946
en el Correo.
El ejemplo de solidaridad humana y la obligación demostrada durante los salvamentos efectuados en las recientes inundaciones de Murcia, se asocian al recuerdo de las previsiones adoptadas por las autoridades bilbaínas en el año 1792, en orden al salvamento de los que caían a la ría.
Más de diez ahogados entre mayo y junio de 1782, indujeron a dichas autoridades a dictar una piadosa instrucción conducente a socorrer a los que se ahogasen o estuvieran en peligro de ahogarse en la ría.
Estas son algunas de las curiosidades que a continuación vamos a relatar.
Que se tocara la campana de la iglesia parroquial de San Nicolás para los que cayeran a la ría desde el Convento de la Concepción hacia el Campo Volantín.
Y la campana de San Antonio Abad para los que cayeran desde dicho lugar hacia Achuri y siempre se tocará la campana en la parroquia de Santiago para que con este medio llegue la noticia a médicos y cirujanos, con brevedad y claridad.
Luego que oyeran dicha campana los médicos y cirujanos deberán acudir a donde estuviese el ahogado para aplicarle los socorros y remedios necesarios, en caso de omisión voluntaria se les impondrá una pena que el Real Consejo juzgue conveniente.
A los barqueros del pasaje del Arenal se les dará por esta noble villa una red barredora y otra a los barqueros del pasaje de la plaza de San Francisco, con la obligación de cuidarla y dar razón de ella.
Dichos barqueros estaban al cuidado de su correspondiente jurisdicción so pena de no permitirles tener más barco.
Los del muelle del Arenal realizaban el trayecto hasta Ripa, también había en Olaveaga, en Burceña, en Zorroza o Zorrozaurre , en Portugalete,Santurce, una venta y un barquero en San Nicolás del Desierto propietario Juan Francisco Elorrieta.Los parajes de Errotabarría y el paraje de Beurco.
Barqueros, pinazas y gabarreros siempre acompañaban a los barcos surtos en la ría para el desembarco de mercancía y pasajeros.
En el año 1809 el comandante de la plaza en Bilbao Bord, ordena que los barcos se amarren por la noche a la orilla derecha de la ría desde la nueve de la noche a las cinco de la mañana.
A la persona que diese parte a las dos parroquias para que se toquen las campanas se le darán dos reales de vellón y a la persona que avisase a los tres médicos y cirujanos asalariados de la villa y del Santo Hospital de Bilbao se le darán cuatro reales de vellón de gratificación.
A la persona o personas que saquen vivo al que hubiese caído en la ría o antes del cuarto de hora de su caída se le dará cien reales, al que pasase de un cuarto de hora y no llegase a la media hora cincuenta reales y a los que pasasen de ese tiempo veinte reales, el tiempo se verificará con testigos.
El que entrara en el agua a sacar al caído, llevará consigo dos cordeles o cuerdas, una con un gancho para socorrer al ahogado.
Se llevará inmediatamente donde ha caído a la ría, por alguna persona un féretro, un colchón, cuatro sábanas y cuatro mantas de bastante abrigo, por dos personas que seguirán el rumbo de la orilla de los que procurasen sacar al ahogado y luego que lo saquen lo enjugaran muy bien todo el cuerpo y cabeza con dos sábanas después de haberle desnudado y lo envolverán con la otra, con las cuatro mantas y lo conducirán en el féretro a la casa señalada.
En el cuarto señalado de ella habrá un tonel grande de ceniza fuerte de lentisco o retama, una caldera grande y sus trébedes correspondientes, dos copa de madera y yeso de altura proporcionada para poner debajo un catre fuerte, una máquina fumigatoria y otra lasuñatería, una fresquera con los espíritus que se dirán.
Calentarán muy bien las cenizas referidas, el catre lo cubrirán con ellas hasta una altura de cinco o seis pulgadas y debajo pondrán las copas encendidas con carbón a fin de conservar las cenizas bien calientes para cuando llegue el ahogado.
El cuerpo se pondrá en el centro sobre las cenizas, siempre de lado y nunca boca arriba, sobre el cual se echaran otras cenizas cubriéndolas totalmente a excepción de la cara, las se pondrán de modo que caliente el cuerpo de arriba abajo y se procurará que tenga siempre la cabeza algo levantada.
Al ahogado que tiene señales de vida no le podrán desamparar nunca los médicos y los cirujanos. La experiencia ha demostrado que aunque hayan llevado mucho tiempo en el agua y tengan el color amoratado que la apariencia nada había que esperar,con tres o cuatro horas de tentativas y porfías y sin aflojar coronaron el suceso.
Finalmente se dejaban a los facultativos las ulteriores operaciones que peculiarmente les pertenecían y que eran las siguientes: Lo primero que se debe hacer será introducir en la boca del ahogado, la máquina o tubo insuflatorio y un hombre robusto se aplica a soplarle aire a los pulmones con todas sus fuerzas. Esta máquina no es más que un soplete con una plancha que tapa la boca y una tenaza que cierra las narices del paciente, pero aunque esta máquina sirve para hacer la operación más cómoda y eficaz, no es esencialmente precisa y en su defecto se puede utilizar cualquier cañón de madera, caña o metal, vaina de cuchillo o espadín......
Al mismo tiempo que se inspira aire por la boca, se pondrá en uso la máquina fumigatoria, la que no es más que una pipa de fumar tabaco que sirve a los facultativos para echar chisteres de tabaco en las partes difíciles y pasiones ilíacas(se refiere a una parte del intestino delgado, vena ilíaca).
Introducir la cánula en el orificio posterior y el hornillo de tabaco escondido, se sopla por él y de este modo se introduce el humo en los intestinos.
Si aún el paciente no da señales de volver, de las venas yugulares se le sacará 12 onzas de sangre, algunos lo hacen en el pie otros en el brazo de donde rara vez se logra que salga sangre. Después de sangrado se le arrimaran a las narices, con plumas al modo como se hacen con los apopléticos con algunos de los espíritus estimulantes como son la sal de amoníaco......Otras veces mediante un tubo se le introducirá polvos estornudatorios.
También se aconseja friegas con bayetas o lienzo ásperos calientes , empapados en espíritu de vino alcanforado y saturado de amoníaco. Estas friegas se darán sobre el espinazo, espalda o pecho. También se podrá usar agua de la Reina de Hungría.
Si pasado el tiempo se observa que los remedios no reaniman al ahogado se podrá hacer la operación de broncotomía y por ella hacer las inspiraciones de aire.
Terminada la instrucción y viendo que todos estos remedios son infructuosos, a estos desgraciados se les debe absolver y administrar la Santa Unción conforme a las doctrinas teológicas.
LAS OTRAS HISTORIAS:
Pleitos antiguos siempre tuvo la villa de Bilbao con la de Portugalete desde enero de 1463, por el canal y la barra de la ría que va de Portugalete a Punta Galea.
En el año 1491 Tristán Díaz de Leguizamón era el preboste de la villa de Bilbao y Ochoa Salazar lo era de Portugalete y discutían sobre la cobranza de derechos de prebostad, de todas las mercancías que pasaban en navíos por la ría. Primero por la jurisdicción de Portugalete para desembarcar en Bilbao.
El preboste de Bilbao estaba en posesión de los derechos de prebostad de todos los navíos que vienen por mar y que tras fondear en la barra de Portugalete, llevan su mercancía en bateles o pinazas a Bilbao. Como los que se cargan en Bilbao y se llevan a Portugalete.
El licenciado Garci López Chinchilla(juez privativo) sentencia a favor de Bilbao, en una provisión dada por el rey Fernando el Católico.
En los años que van de 1588 a 1693 se celebran actos de jurisdicción por el Consulado de Bilbao, con una visita a la barra, ría y canal de Portugalete para beneficio del comercio. Ya en el año 1502 en un informe presentado por Guiot de Beagrant y Juan de Garita a petición de la villa de Bilbao, hacen un estudio sobre el estado de la barra de Portugalete y la desembocadura de la ría. Obras necesarias para desviar el cauce del río que viene de Presalsu que es el responsable del deterioro de dicha barra a causa de la mucha arena que lleva.
Juan de Garita era cantero y vecino de Portugalete, en el año 1560 vive en Bilbao y es nombrado oficial cantero. Construyó muelles y paredes en Bilbao (Tendería,Belosticalle).
La ría traía prosperidad y riqueza pero también la peste, los años 1530 y 1531 hubo epidemia de peste en Bilbao.
Cuando había sospechas de peste se daba fuego a la casa.
Tres navíos procedentes de Nantes que iban a desembarcar en las Torres de Luchana, los vecinos se niegan a que descarguen la mercancía por temor al contagio.
En el año 1598 varios marineros de cierto navío bretón cargado de trigo, han portado la peste con ellos. Entró en la ría procedente de Santander.
El Consulado de Bilbao ordena a los mercaderes franceses, flamencos y portugueses que residen en la villa que entreguen a cuenta el derecho de "avería"las cantidades que les han sido asignadas, para con ello hacer frente a la peste que sufre Bilbao en el año 1599.
La avería era un impuesto que pagaban los armadores y mercaderes para sufragar los gastos de las naves o armadas de guerra en la protección de naves mercantes.
En el año 1548 los dueños de las veneras(criaderos de mineral) de Lerreagaburu sitas en Achuri, vierten piedras y tierra a la ría ocasionando perjuicios al tráfico marítimo de la ría.
El corregidor de Vizcaya pide a los que poseen tabernas y posadas en las villas de Portugalete, Deusto, Begoña y Abando para que ni recojan ni den de comer y beber a los pilotos y marineros que lleguen a la ría en sus naves después de la hora de la oración y que lo consumen lo paguen al contado.
Para atender a los ahogados estaban los curas de agonizantes, fue tradicional en Bilbao que los curas y coadjutores en cada una de las cuatro parroquias se encargasen de los agonizantes, a fin de atenderlos y facilitarles los últimos sacramentos.
Para los oficios fúnebres estaban las plañideras, en Bizkaia se las llamaba "Erostariak".
Antiguamente se hacían grandes llantos en los entierros y se alquilaban mujeres para llorar. En Bizkaia tenían fama las
plañideras o lloronas de Bermeo. Iban por la calle y así proseguían hasta entrar en la iglesia,tenían que emplear la fuerza para hacerlas callar durante la misa y en el momento de poner el cadáver en la sepultura no había fuerza humana que las obligara a estar en silencio.
Las había de dos clases las que entonaban elegías(hiletariak) y las que simplemente plañían.
La ley VI del Fuero de Bizkaia intentó poner coto a esta costumbre sin conseguirlo.
La ley hacía constar que cuando alguien moría se hacían llantos y otros actos deshonestos y que nadie ose mesarse los cabellos, ni rasgarse la cabeza, ni cantando llantos.
La costumbre de pegar a las mujeres para que llorasen se mantuvo hasta el siglo XIX.
Los aguaduchos o inundaciones fueron una constante en la vida de Bilbao a través de los siglos de los que tenemos datos, en setiembre de 1553, la crecida en el año 1593, en los años 1615, 1651,1657, 1762, 1764, 1771 en ese año fuertes temporales. Pero la ría y el cauce de la ría no estaba como hoy la podemos ver, existía una isla en el paraje de la Cava otro en la isla de Uribitarte y algunos otros meandros que obstaculizaban la libre circulación fluvial. En el año 1762 se empieza a estudiar el proyecto del llamado "Canal de la Plata"para ensanchar la ría a la altura del Campo Volantín. Los bilbaínos con humor lo bautizaron Canal de la Plata por su elevado coste económico. Las autoridades municipales recurrían a los impuestos sobre el vino,tinto, claro y blanco, también la barrica de cerveza, para financiar las obras y reparaciones de las inundaciones.
En el año 1886 Juan Calleja coloca una barca en el muelle de Ripa para impartir clases de natación en la ría.
Archivo Diputación Foral de Bizkaia
Liburuklik
Hemeroteca Diputación Foral de Bizkaia
Los lloriqueos,curiosidades de Vizcaya de Antonio de Trueba
Los Vascos y la historia,Julio Caro Baroja.
Lentisco es un arbusto de hojas verdes y frutos rojos, alivia los problemas catarrales-pulmonares, gota y reumatismo.....
Trébe o trebedes, es un trípode metálico con forma de aro o triángulo para calentar o cocinar.
FIN
Lo escribió Julián Echevarría"Camarón" el 3 de mayo de 1946
en el Correo.
El ejemplo de solidaridad humana y la obligación demostrada durante los salvamentos efectuados en las recientes inundaciones de Murcia, se asocian al recuerdo de las previsiones adoptadas por las autoridades bilbaínas en el año 1792, en orden al salvamento de los que caían a la ría.
Más de diez ahogados entre mayo y junio de 1782, indujeron a dichas autoridades a dictar una piadosa instrucción conducente a socorrer a los que se ahogasen o estuvieran en peligro de ahogarse en la ría.
Estas son algunas de las curiosidades que a continuación vamos a relatar.
Que se tocara la campana de la iglesia parroquial de San Nicolás para los que cayeran a la ría desde el Convento de la Concepción hacia el Campo Volantín.
Y la campana de San Antonio Abad para los que cayeran desde dicho lugar hacia Achuri y siempre se tocará la campana en la parroquia de Santiago para que con este medio llegue la noticia a médicos y cirujanos, con brevedad y claridad.
Luego que oyeran dicha campana los médicos y cirujanos deberán acudir a donde estuviese el ahogado para aplicarle los socorros y remedios necesarios, en caso de omisión voluntaria se les impondrá una pena que el Real Consejo juzgue conveniente.
A los barqueros del pasaje del Arenal se les dará por esta noble villa una red barredora y otra a los barqueros del pasaje de la plaza de San Francisco, con la obligación de cuidarla y dar razón de ella.
Dichos barqueros estaban al cuidado de su correspondiente jurisdicción so pena de no permitirles tener más barco.
Los del muelle del Arenal realizaban el trayecto hasta Ripa, también había en Olaveaga, en Burceña, en Zorroza o Zorrozaurre , en Portugalete,Santurce, una venta y un barquero en San Nicolás del Desierto propietario Juan Francisco Elorrieta.Los parajes de Errotabarría y el paraje de Beurco.
Barqueros, pinazas y gabarreros siempre acompañaban a los barcos surtos en la ría para el desembarco de mercancía y pasajeros.
En el año 1809 el comandante de la plaza en Bilbao Bord, ordena que los barcos se amarren por la noche a la orilla derecha de la ría desde la nueve de la noche a las cinco de la mañana.
A la persona que diese parte a las dos parroquias para que se toquen las campanas se le darán dos reales de vellón y a la persona que avisase a los tres médicos y cirujanos asalariados de la villa y del Santo Hospital de Bilbao se le darán cuatro reales de vellón de gratificación.
A la persona o personas que saquen vivo al que hubiese caído en la ría o antes del cuarto de hora de su caída se le dará cien reales, al que pasase de un cuarto de hora y no llegase a la media hora cincuenta reales y a los que pasasen de ese tiempo veinte reales, el tiempo se verificará con testigos.
El que entrara en el agua a sacar al caído, llevará consigo dos cordeles o cuerdas, una con un gancho para socorrer al ahogado.
Se llevará inmediatamente donde ha caído a la ría, por alguna persona un féretro, un colchón, cuatro sábanas y cuatro mantas de bastante abrigo, por dos personas que seguirán el rumbo de la orilla de los que procurasen sacar al ahogado y luego que lo saquen lo enjugaran muy bien todo el cuerpo y cabeza con dos sábanas después de haberle desnudado y lo envolverán con la otra, con las cuatro mantas y lo conducirán en el féretro a la casa señalada.
En el cuarto señalado de ella habrá un tonel grande de ceniza fuerte de lentisco o retama, una caldera grande y sus trébedes correspondientes, dos copa de madera y yeso de altura proporcionada para poner debajo un catre fuerte, una máquina fumigatoria y otra lasuñatería, una fresquera con los espíritus que se dirán.
Calentarán muy bien las cenizas referidas, el catre lo cubrirán con ellas hasta una altura de cinco o seis pulgadas y debajo pondrán las copas encendidas con carbón a fin de conservar las cenizas bien calientes para cuando llegue el ahogado.
El cuerpo se pondrá en el centro sobre las cenizas, siempre de lado y nunca boca arriba, sobre el cual se echaran otras cenizas cubriéndolas totalmente a excepción de la cara, las se pondrán de modo que caliente el cuerpo de arriba abajo y se procurará que tenga siempre la cabeza algo levantada.
Al ahogado que tiene señales de vida no le podrán desamparar nunca los médicos y los cirujanos. La experiencia ha demostrado que aunque hayan llevado mucho tiempo en el agua y tengan el color amoratado que la apariencia nada había que esperar,con tres o cuatro horas de tentativas y porfías y sin aflojar coronaron el suceso.
Finalmente se dejaban a los facultativos las ulteriores operaciones que peculiarmente les pertenecían y que eran las siguientes: Lo primero que se debe hacer será introducir en la boca del ahogado, la máquina o tubo insuflatorio y un hombre robusto se aplica a soplarle aire a los pulmones con todas sus fuerzas. Esta máquina no es más que un soplete con una plancha que tapa la boca y una tenaza que cierra las narices del paciente, pero aunque esta máquina sirve para hacer la operación más cómoda y eficaz, no es esencialmente precisa y en su defecto se puede utilizar cualquier cañón de madera, caña o metal, vaina de cuchillo o espadín......
Al mismo tiempo que se inspira aire por la boca, se pondrá en uso la máquina fumigatoria, la que no es más que una pipa de fumar tabaco que sirve a los facultativos para echar chisteres de tabaco en las partes difíciles y pasiones ilíacas(se refiere a una parte del intestino delgado, vena ilíaca).
Introducir la cánula en el orificio posterior y el hornillo de tabaco escondido, se sopla por él y de este modo se introduce el humo en los intestinos.
Si aún el paciente no da señales de volver, de las venas yugulares se le sacará 12 onzas de sangre, algunos lo hacen en el pie otros en el brazo de donde rara vez se logra que salga sangre. Después de sangrado se le arrimaran a las narices, con plumas al modo como se hacen con los apopléticos con algunos de los espíritus estimulantes como son la sal de amoníaco......Otras veces mediante un tubo se le introducirá polvos estornudatorios.
También se aconseja friegas con bayetas o lienzo ásperos calientes , empapados en espíritu de vino alcanforado y saturado de amoníaco. Estas friegas se darán sobre el espinazo, espalda o pecho. También se podrá usar agua de la Reina de Hungría.
Si pasado el tiempo se observa que los remedios no reaniman al ahogado se podrá hacer la operación de broncotomía y por ella hacer las inspiraciones de aire.
Terminada la instrucción y viendo que todos estos remedios son infructuosos, a estos desgraciados se les debe absolver y administrar la Santa Unción conforme a las doctrinas teológicas.
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| plano de Bilbao año 1541 |
LAS OTRAS HISTORIAS:
Pleitos antiguos siempre tuvo la villa de Bilbao con la de Portugalete desde enero de 1463, por el canal y la barra de la ría que va de Portugalete a Punta Galea.
En el año 1491 Tristán Díaz de Leguizamón era el preboste de la villa de Bilbao y Ochoa Salazar lo era de Portugalete y discutían sobre la cobranza de derechos de prebostad, de todas las mercancías que pasaban en navíos por la ría. Primero por la jurisdicción de Portugalete para desembarcar en Bilbao.
El preboste de Bilbao estaba en posesión de los derechos de prebostad de todos los navíos que vienen por mar y que tras fondear en la barra de Portugalete, llevan su mercancía en bateles o pinazas a Bilbao. Como los que se cargan en Bilbao y se llevan a Portugalete.
El licenciado Garci López Chinchilla(juez privativo) sentencia a favor de Bilbao, en una provisión dada por el rey Fernando el Católico.
En los años que van de 1588 a 1693 se celebran actos de jurisdicción por el Consulado de Bilbao, con una visita a la barra, ría y canal de Portugalete para beneficio del comercio. Ya en el año 1502 en un informe presentado por Guiot de Beagrant y Juan de Garita a petición de la villa de Bilbao, hacen un estudio sobre el estado de la barra de Portugalete y la desembocadura de la ría. Obras necesarias para desviar el cauce del río que viene de Presalsu que es el responsable del deterioro de dicha barra a causa de la mucha arena que lleva.
Juan de Garita era cantero y vecino de Portugalete, en el año 1560 vive en Bilbao y es nombrado oficial cantero. Construyó muelles y paredes en Bilbao (Tendería,Belosticalle).
La ría traía prosperidad y riqueza pero también la peste, los años 1530 y 1531 hubo epidemia de peste en Bilbao.
Cuando había sospechas de peste se daba fuego a la casa.
Tres navíos procedentes de Nantes que iban a desembarcar en las Torres de Luchana, los vecinos se niegan a que descarguen la mercancía por temor al contagio.
En el año 1598 varios marineros de cierto navío bretón cargado de trigo, han portado la peste con ellos. Entró en la ría procedente de Santander.
El Consulado de Bilbao ordena a los mercaderes franceses, flamencos y portugueses que residen en la villa que entreguen a cuenta el derecho de "avería"las cantidades que les han sido asignadas, para con ello hacer frente a la peste que sufre Bilbao en el año 1599.
La avería era un impuesto que pagaban los armadores y mercaderes para sufragar los gastos de las naves o armadas de guerra en la protección de naves mercantes.
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| imagen de la ria |
En el año 1548 los dueños de las veneras(criaderos de mineral) de Lerreagaburu sitas en Achuri, vierten piedras y tierra a la ría ocasionando perjuicios al tráfico marítimo de la ría.
El corregidor de Vizcaya pide a los que poseen tabernas y posadas en las villas de Portugalete, Deusto, Begoña y Abando para que ni recojan ni den de comer y beber a los pilotos y marineros que lleguen a la ría en sus naves después de la hora de la oración y que lo consumen lo paguen al contado.
Para atender a los ahogados estaban los curas de agonizantes, fue tradicional en Bilbao que los curas y coadjutores en cada una de las cuatro parroquias se encargasen de los agonizantes, a fin de atenderlos y facilitarles los últimos sacramentos.
Para los oficios fúnebres estaban las plañideras, en Bizkaia se las llamaba "Erostariak".
Antiguamente se hacían grandes llantos en los entierros y se alquilaban mujeres para llorar. En Bizkaia tenían fama las
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| año 1912, todas estas viejas beatas sumaban más de cuatrocientos años Revista Novedades,Biblioteca Sociedad Bilbaína. |
Las había de dos clases las que entonaban elegías(hiletariak) y las que simplemente plañían.
La ley VI del Fuero de Bizkaia intentó poner coto a esta costumbre sin conseguirlo.
La ley hacía constar que cuando alguien moría se hacían llantos y otros actos deshonestos y que nadie ose mesarse los cabellos, ni rasgarse la cabeza, ni cantando llantos.
La costumbre de pegar a las mujeres para que llorasen se mantuvo hasta el siglo XIX.
Los aguaduchos o inundaciones fueron una constante en la vida de Bilbao a través de los siglos de los que tenemos datos, en setiembre de 1553, la crecida en el año 1593, en los años 1615, 1651,1657, 1762, 1764, 1771 en ese año fuertes temporales. Pero la ría y el cauce de la ría no estaba como hoy la podemos ver, existía una isla en el paraje de la Cava otro en la isla de Uribitarte y algunos otros meandros que obstaculizaban la libre circulación fluvial. En el año 1762 se empieza a estudiar el proyecto del llamado "Canal de la Plata"para ensanchar la ría a la altura del Campo Volantín. Los bilbaínos con humor lo bautizaron Canal de la Plata por su elevado coste económico. Las autoridades municipales recurrían a los impuestos sobre el vino,tinto, claro y blanco, también la barrica de cerveza, para financiar las obras y reparaciones de las inundaciones.
En el año 1886 Juan Calleja coloca una barca en el muelle de Ripa para impartir clases de natación en la ría.
Archivo Diputación Foral de Bizkaia
Liburuklik
Hemeroteca Diputación Foral de Bizkaia
Los lloriqueos,curiosidades de Vizcaya de Antonio de Trueba
Los Vascos y la historia,Julio Caro Baroja.
Lentisco es un arbusto de hojas verdes y frutos rojos, alivia los problemas catarrales-pulmonares, gota y reumatismo.....
Trébe o trebedes, es un trípode metálico con forma de aro o triángulo para calentar o cocinar.
FIN
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